De poco ha servido la visita a Almazán de los agricultores vallisoletanos del Bajo Duero. Un centenar de personas han pedido que les dén el agua que sobra para salvar los cultivos. Los regantes de Almazán han insistido en el no y ha instado a la Confederación Hidrográfica del Duero a que tome una decisión. Los del Bajo Duero creen que este encuentro no llegaría a tiempo. Les hace falta el agua ya.