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Dos lápidas con los epitafios de Rachida y Rita de Cassia, ambas mujeres fallecidas en Soria, abren la puerta a un cementerio improvisado en la plaza de San Esteban de la capital. Un total de cincuenta y una cruces recuerdan las vidas que se ha llevado la violencia de género este año en nuestro país. En el acto organizado por Antigona, los hombres han depositado rosas en apoyo a las mujeres.