El objetivo de esta jornada es reconocer el trabajo de todas las familias históricamente ligadas a la trashumancia en esta zona de la provincia así como sumarle una vertiente turística y promocional de Tierras Altas. En la provincia solo sobreviven dos rebaños. Tras el conteo de los animales y separar el ganado, las dulzainas animan el mercado trashumante hasta la hora de la comida popular.