El Numancia se lleva los tres puntos ante el Córdoba en un día marcado por la nieve que fue tiñendo de blanco Los Pajaritos y que a su vez fue nublando las ideas de los rojillos que a punto estuvieron de desaprovechar una renta de tres goles.

La primera parte estuvo marcada por la pegada local. Diamanka por dos veces de cabeza revertía el trauma del balón parado, entre media, Oyarzun de disparo fuerte y al primer palo había hecho el tanto restante.

El paso por los banquillos volvía a mostrar esa inseguridad atrás. Primero Miguel del las Cuevas en la primera jugada de los segundos 45 minutos, y posteriormente Piovaccari, metían el miedo en el cuerpo al Numancia que aun así no sufrió en cuanto a ocasiones se refiere.

Tres valiosos puntos que dan un respiro a los de López Garai y que son un buen inicio de segunda vuelta