La selección española femenina de balonmano se despidió ayer de cualquier posibilidad de pelear por los metales en el Europeo de Francia, tras caer por 23-29 ante Alemania, en un encuentro en el que el conjunto nacional volvió a mostrar la misma endeblez defensiva que ya le costó un severo correctivo ante Hungría en el encuentro anterior.
Como si de un ‘déjà vu’ se tratara, las ‘Guerreras’ volvieron a incurrir, punto por punto, en los mismos errores que cometieron el pasado lunes ante las magiares. Sin la profundidad necesaria para dificultar los lanzamientos de las cañoneras rivales, la defensa española quedó a merced de los latigazos de Xenia Smits y Alicia Stolle, que no tuvieron piedad.
El equipo germano exhibió mucha solidez desde el inicio y consiguió al descanso una cómoda renta de ocho goles (9-17). Y aunque las pupilas de Carlos Viver reaccionaron en la segundo parte, no hallaron el modo de voltear a tiempo la situación.
Con un desempeño cuesta abajo en este Europeo, el cambio de ciudad tampoco trajo suerte a las españolas. La agridulce ronda preliminar ya era agua pasada, con saldo de un triunfo inerte ante Croacia y dos duras derrotas ante Holanda y Hungría, lo que había llevado a España a la segunda fase con el marcador de puntos a cero y la hazaña de ganar los tres partidos siguientes para poder soñar con la lucha por las medallas.
Así, en los cálculos de las ‘Guerreras’ solo cabía ganar por triplicado. Pero en la primera de sus tres nuevas citas, Alemania borró de un plumazo las opciones de un rival que salió sin ímpetu y lo pagó caro. Nerea Pena fue un reflejo del desencanto español, con cero goles en sus seis lanzamientos en la primera mitad.
Para más inri, la guardameta Silvia Navarro también mostró escasez de pericia. Su mala estadística, una única parada en 13 disparos, provocó que Viver sacase a la pista a Merche Castellanos en un intento de cambiar dinámicas. No obstante, el cuadro germano siguió con tino y defendió con maestría a la primera línea rival.
Solo tres goles de ese primer frente de ataque, bagaje muy pobre para abordar a una selección al alza en este campeonato. Tras el descanso, las asistencias de Alicia Fernández desde el extremo dieron alas a la remontada, pero fue un espejismo y España tan solo aguantó el tipo a su oponente.
La veterana Carmen Martín despertó en las labores anotadoras, pero su expulsión por roja directa en los compases finales fue la puntilla a un equipo que se había visto superado por el nivel de una complicada ‘Main Round’. Las de Viver aún tienen pendientes otras dos citas, contra Rumanía y Noruega, aunque ya sin posibilidad de acceder a ‘semis’.