Nicers, los calcetines solidarios

Ana Pilar Latorre
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Una soriana impulsa esta original iniciativa para dar visibilidad a distintas ONGs y los proyectos que las mismas ponen en marcha

Nicers, los calcetines solidarios

La soriana Marta García impulsa junto a su marido, Jorge Pesquero, un proyecto social y responsable al que han denominado Nicers y que pretende «dar visibilidad a ONGs españolas y ayudarles a financiar sus iniciativas sociales». Con el lema Nice socks, better actions (Calcetines bonitos, mejores acciones), desde finales de 2017 donan a las organizaciones el 50% de los beneficios de la venta de calcetines personalizados y diseñados para las mismas. «Creemos que cada paso cuenta, que pequeños movimientos pueden generar importantes cambios, que está en nosotros mismos crear un mundo mejor y que solo basta con luchar por algo en lo que crees para llegar a conseguirlo».Así explica Marta García la filosofía de esta iniciativa de venta de calcetines solidarios para aportar financiación y visibilidad a pequeñas y medianas ONGs que «apoyan grandes causas». 

«Los calcetines son buenos, pero aún más las acciones que hay detrás de la venta de cada uno de ellos. Queríamos satisfacer necesidades humanas, cuidar el planeta reduciendo la huella de carbono, usar algodón orgánico, cero plásticos, apoyar la diversidad cultural, realizar comercio justo cuidando toda la cadena de valor, potencial el trabajo nacional... ¡Cada paso cuenta!», detalla incidiendo en el objetivo de su proyecto social que da pasos firmes.

Nicers apoya a organizaciones «transparentes y fiables», como Flores de Kiskeya, Fundación Caíco, The Water Van Project, Sonrisas de Bombay y Menudos Corazones; al tiempo que han colaborado con la Fundación Mapfre y Cabify, que han apostado por este producto como regalo para sus empleados. Del total que recaudan, restan lo que cuestan los calcetines y lo que queda lo donan a partes iguales a las ONGs, por lo que no se llevan nada, insisten.En caso de no obtener beneficios, ellos han fijado donar cada año a cada organización 300 euros.

Flores de Kiskeya ayuda a mujeres embarazadas y a bebés en Haití, mientras que Fundación Caíco se centra en la lucha contra el cáncer infantil, apoyando a niños enfermos y a sus familias. The Water Van Project distribuye filtros potabilizadores en comunidades de América Latina que no tienen acceso al agua limpia y segura y Sonrisas de Bombay lucha contra la pobreza y en pro de los derechos humanos y la igualdad de oportunidades en India. Por último, Menudos Corazones ayuda a niños y jóvenes con cardiopatías congénitas.

gran acogida. Ahora ponen a la venta 13 diseños y en año y medio la acogida del proyecto Nicers «ha ido en aumento». «La gente está muy sensibilizada y muchos adquieren los calcetines valorando, además de por ser solidarios, por estar fabricados de una manera responsable, en algodón orgánico, en España, no se externaliza nada... Por ejemplo, el diseño para The Water Van Project «es una furgoneta con una ola de agua dentro, junto al distintivo de Nicers, una franja con el logo que identifica a los calcetines responsables y solidarios». «Es un proyecto que ha surgido de nosotros y no hemos visto nada parecido», añade. Se sienten agradecidos porque creen que su proyecto es «reconfortante» al ayudar su trabajo a la gente. «Hacemos algo bueno por el mundo y las personas, pero a lo solidario se suma también el respeto al medio ambiente», subraya Marta García.