El cierre parcial de la Administración estadounidense alcanza su tercera semana sin que el presidente, Donald Trump, y la oposición hayan logrado acercar posturas sobre la construcción de un muro en la frontera con México.

Trump aseguró que la reunión que sostuvo su vicepresidente, Mike Pence, con los líderes demócratas en busca de un acuerdo que permita reabrir la Administración terminó sin muchos avances.

«No se avanzó mucho hoy», indicó el gobernante, que se mantiene inquebrantable en su exigencia de recursos para el muro entre su país y México. «Después de muchas décadas, debemos arreglar de manera definitiva y para siempre los problemas en la frontera sur», agregó el jefe de Estado.

El presidente señaló que los demócratas pueden solucionar la parálisis parcial «en muy poco tiempo», e insistió en que «todo lo que tienen que hacer es aprobar una seguridad fronteriza real», incluido el muro. «Quiero detener el cierre tan pronto estemos de acuerdo en una fuerte seguridad fronteriza», sentenció el magnate.