Hace diez años entraba en funcionamiento el túnel de Piqueras, con bastante retraso pero finalmente una realidad, lo que no ha ocurrido con otras esperadas infraestructuras. Fueron 18 los años de espera y tramitaciones de una actuación cuyos plazos se dilataban en el tiempo, debido a modificaciones en normativa de seguridad, galerías de evacuación y tendidos de red. Las reivindicaciones de la plataforma Soria ¡Ya! llegaron también a Piqueras, a través de una parodia de inauguración con los representantes políticos nacionales. El corredor, en el trayecto de la N-111, eliminó 12 kilómetros de curvas y otros tantos minutos de recorrido entre Soria y La Rioja. La inversión fue de 75,3 millones de euros, 20 más de lo previsto y gran parte para expropiaciones; 16 euros por kilómetro, ya que eran 4,7 kilómetros y 2,4 de túnel. La pendiente máxima es del 2,9% y se eliminó el 4% de desnivel respecto a la carretera. De trazado curvilíneo con pendiente, se incluyó en la vertiente soriana se construyó un viaducto de 225 metros. Es un túnel de doble circulación, con un carril de 3,5 metros en cada sentido y separados por una mediana.
En mayo de 1948 el proyecto anunciado por el gobernador, Jesús Posada Cacho, fue bien acogido en el Ministerio de Obras Públicas al considerarse necesario para las dos zonas y en 1949 se proclamó el inicio de las obras... El proyecto se estancó y se volvió a retomar en 1969, aunque hasta 1989 no se registró la orden de estudio de anteproyecto y un año más tarde se redactó. En 1993 salió a información pública y en 1996 se aprobó el expediente con el gobierno de Felipe González. El visto bueno a la construcción llegó 1997 y un año después se incluyó la obra en el presupuesto.
En 2002 el ministro de Fomento, Francisco Álvarez Cascos, colocó la primera piedra y un año más tarde se iniciaron las obras en las dos vertientes. En 2005 hubo un retraso, al encontrar terreno más arcilloso de lo previsto al perforar la montaña, por lo que se reforzaron las paredes; y en 2006 se descartó la línea eléctrica prevista, porque atravesaba la Ciudad del Medio Ambiente. El proyecto se ajustó a la nueva normativa europea sobre galerías de evacuación tras el accidente en el túnel de San Gotardo (en 2001 en Suiza). A principios de 2008 comenzaron las obras de modernización y, finalmente, en octubre entró en funcionamiento con el PSOE de nuevo en el Gobierno, sin inauguración oficial.
sin incidentes. Afortunadamente, no ha ocurrido en estos diez años ningún accidente relevante, solo algún incidente leve por averías de vehículos, principalmente. Para el subdelegado del Gobierno en Soria, Miguel Latorre, es destacable que «desde que se inauguró nunca haya habido ningún incidente» en el túnel, que «facilitó el tráfico y mejoró la circulación entre Soria y Logroño». Además de los avances en seguridad, hace referencia a que acortó el tiempo de viaje en 12-14 minutos y a que los usuarios «están encantados» por ello. Latorre apunta que el túnel se cierra una vez al año para labores de mantenimiento y revisión y que se han realizado dos simulacros en 2012 y 2016, ya que deben hacerse cada cuatro años, con la participación de efectivos de Protección Civil. «Hay que estar preparados, pero por suerte nunca ha habido incidentes significativos», apunta.
«El tráfico ha aumentado paulatinamente en los últimos años», asegura la jefa de explotación del túnel de Piqueras, Isabel Elvira, de la empresa Collosa. Según las estadísticas del Ministerio de Fomento, se ha pasado de 1.231 vehículos al día que circulaban por el túnel en 2009 a los 1.308 que lo hacían en 2011 y a los 1.467 de 2017. Del total, el 18,3% son vehículos pesados, el mismo porcentaje que hace diez años. Ylas cifras de circulación diaria quedan aún algo lejos de los 3.000 que se estimaban cuando se puso en marcha para 2012. Ytampoco superan a las de antes de construir el túnel, ya que eran 2.420 los vehículos que pasaban por allí.
Lo que sí es cierto es que es uno de los más modernos de Europa, al haberse podido ajustar a la normativa más reciente. Se incluye en la tipología de túnel bidireccional de menos de mil metros, con una IMDE por carril de menos de mil vehículos al día, según el Real Decreto 635/2006. Por ello, su equipamiento mínimo incluye aceras y salidas de emergencia; drenaje de líquidos tóxicos, sistema informático de extracción de humos, cable para detección de incendios, detectores de CO y opacímetros; centro de control y circuito cerrado de TV; iluminación normal, de seguridad y de emergencia; ventilación y generadores de emergencia; sistema de alimentación ininterrumpida; detección automática de incidentes, puestos de emergencia y señalización de salidas y equipos de emergencia; paneles de señalización variable, barreras exteriores, semáforos exteriores, megafonía, red de hidrantes, aforadores y mensajería de emergencia por canales de radio para usuarios.
El túnel tiene una galería de evacuación paralela de la misma longitud del túnel, que permite a los usuarios salir a un lugar libre de humo y a cualquiera de las bocas. Tiene el mayor número de salidas de emergencia hacia dicha galería de evacuación, disminuyendo el recorrido máximo a cien metros para los usuarios. Por último, dispone de un caz longitudinal que permite la evacuación de vertidos tóxicos en la calzada, disminuyendo el riesgo en caso de accidentes con mercancías peligrosas.