Aprovechar los deshechos de las explotaciones ganaderas para conseguir un fertilizante de calidad libre de productos químicos y respetuoso con el medio ambiente. El ensayo Life Smart Fertirrigation puede marcar un antes y un después en la agricultura a nivel internacional y cuenta con 2,6 millones de euros de financiación europea. Los purines de la explotación ganadera son canalizados hasta unas balsas, mediante un complejo sistema se separan y se transforman, de esta forma se consiguen dos productos, pelets de biomasa orgánica y un fertilizante líquido que se puede aplicar a los cultivos mediante los sistemas de riego.