Por primera vez desde que se llama Río Duero Soria, el conjunto celeste lograba el pase a semifinales. Dentro del vestuario reconocen que se han quitado de encima una mochila que pesaba una tonelada. Aunque nunca lo reconocerán, había presión por superar los cuartos de final tras una brillante temporada. A esto se sumaba la oportunidad de acabar con su bestia negra, Unicaja Almería.
Tras la euforia propia de ganar el partido, los jugadores mostraban alegría, pero a su vez miraban más allá. "Ahora a por Melilla", aseguraba Pelegrín Vargas durante la retransmisión de La 8 Soria. "No podemos pensar más allá, hoy terminó, toca ir a casa recuperar y enfocarse en el próximo", añadía.
El puertorriqueño fue la estrella junto con un espectacular Juan Pablo Moreno. "Sigo insistiendo en ir paso a paso", relataba el opuesto. "Hay que seguir trabajando, pero hoy ha sido un gran partido", sentenciaba.