Rafael Monje

DE SIETE EN SIETE

Rafael Monje

Periodista


Las cifras de la pandemia y más

18/09/2022

El Instituto Nacional de Estadística (INE) ha repasado las cuentas de nuestro país correspondientes a los años 2019, 2020 y 2021. Retoca al alza en cuatro décimas el PIB de 2021 y rebaja en cinco décimas el del 2020, año en el que se registró el epicentro de la pandemia sanitaria provocada por el coronavirus. Según el INE, la revisión de 2020 obedece a los análisis demoscópicos como son la Encuesta Estructural de Empresas, la Encuesta de Estructura de la Construcción y la Estadística sobre actividades de I+D, que se han publicado a lo largo del segundo semestre de 2021 y el primer semestre del actual año. De este modo, la Contabilidad Nacional Anual de España avanza una estimación de crecimiento económico en 2021 del 5,5%.
Tras la actualización de la serie contable, el INE ha revisado a la baja en una décima (hasta el 2%) el crecimiento del PIB en 2019, mientras que para 2020 la revisión es de cinco décimas de descenso, hasta el -11,3%. Este fuerte castigo económico se produjo tras el impacto y la parálisis generada por la pandemia sobre la actividad económica española, con la imposición de confinamientos para tratar de contener la propagación del virus. 
Se estima que el quebranto provocado por la pandemia en el caso de España ha sido de 127.524 millones de euros en términos de PIB, de los que ha logrado recuperar la mitad en 2021, una cuantía que, lógicamente, aún se sitúa muy alejada de la época prepandemia.
Todo ello representa un coste de 2.696 euros por habitante. O sea, que tomen buena nota. Este desplome, y con el mencionado porcentaje de recuperación, hace que España sea hoy la única de las grandes economías (también de las pequeñas) que todavía no ha recuperado los niveles de PIB previos a la crisis. 
Una causa elocuente de esta pobre evolución es, entre otras, la estructura productiva del país y que, como es sabido, se sustenta en su alta dependencia del comercio, el transporte y la hostelería, sectores que llegaron a retroceder en conjunto un 25,5% durante 2020. 
En un escenario donde la economía mundial se asoma a una desaceleración muy significativa, con previsión de fuertes caídas de la actividad y múltiples perturbaciones que acechan, el retraso en la recuperación española frente a otras economías supondrá un lastre importante. 
A pesar de que en España se mantiene para 2022 la previsión de crecimiento del PIB del 4,1%, ya se rebaja, y mucho, el previsto para 2023; en concreto del 3,3 % al 1,8 %. Son números y porcentajes objetivos que corroboran el pesimismo de muchos acerca de la evolución de la economía del país, lastrando las pocas esperanzas de una mejora a corto plazo ante la subida generalizada de los precios y el temor a las consecuencias de la guerra en Ucrania. 
La propia Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas) prevé que España sólo crezca un 1,9% en 2023 y se contraiga este cuarto trimestre. Pero, augura además una «fuerte desaceleración» de la economía española en el segundo semestre de este mismo año, con un crecimiento «muy débil» en el tercer trimestre (0,1%) y una caída de dos décimas en el cuarto trimestre. Por tanto, la crisis de la covid-19 ha sido más aguda de lo calculado, a lo que se suma ahora un desalentador panorama que hará más dura la necesaria recuperación.