El Río Duero Soria visitaba al Leleman Conqueridor Valencia, invicto hasta ahora, con la oportunidad de engancharse a la zona alta de la Superliga, pero consciente de que el equipo revelación pondría las cosas muy complicadas.

El principio de encuentro mostró la gran solidez de los celestes. Ante un rival exigente, conseguían llevarse las dos primeras mangas. Los locales aprovechaban la relajación visitantes para empatar un partido que se decidirá en la última manga.

Tras un toma y daca hasta el empate a 10, los de Alberto Toribio mostraron más temple para acabar con un 10-15, sumar dos puntos y demostrar que aspirar a la zona alta de la Superliga es vez más real.