El Ayuntamiento de Covaleda ha aprobado dos líneas de ayudas extraordinarias para ayudar a aquellos vecinos que se encuentren en situación de vunerabilidad social a consecuencia del COVID-19 y que ya se pueden solicitar.

Por un lado se pretende ayudar a «personas vulnerables que no tengan opciones de solicitar  ningún tipo de ayuda en ninguna otra institución pública o privada, como por ejemplo, personas que no estén en situación legal en España», explica Carmen Roldán, la trabajadora social del Ayuntamiento. Esta primera línea de ayudas está pensada para personas «que se pueden quedar mañana en la calle y no tener absolutamente ningún recurso». El importe de la prestación única será el que se solicite motivadamente, con un máximo de 1.000 euros.

«Todo lo que sea dar liquidez a la gente que vive en el pueblo le permite a la gente el permanecer en su lugar de origen, y está disponible a todos los posibles beneficiarios». El importe de las ayudas se ha calculado una estimación pero como es una ayuda para personas concretas tampoco pretenden hacer un efecto llamada, se ha estimado la cantidad que se podría destinar pero no es una cantidad fija y dependerá de las solicitudes.

PÓSITO. El Ayuntamiento ha recuperado la figura del pósito, para los  vecinos beneficiarios de suerte de pinos en situación de vulnerabilidad generada por el COVID-19 a la que solo se podrán acoger los descendientes del pueblo y que estén empadronados. «Cuando se subasta la madera anualmente se le da una parte del dinero que he sacado en la venta de suerte de pinos», explica la trabajadora social. Del dinero del Ayuntamiento se han hecho estas ayudas «que en realidad son adelantos que no tienen ningún interés y calculados sobre su suerte de pinos». «Se recogerá la suerte de pinos como aval de esas personas». 

La cuantía de la prestación ascenderá al importe solicitado, motivadamente, por las personas en situación de vulnerabilidad siendo una ayuda única y con un importe máximo de 2.400 euros por lote completo o 1.200 euros por medio lote. De esta manera, «se les facilita liquidez inmediata para que con este dinero que puedan un poco tirar adelante ahora mismo y luego tienen la obligación de ir devolviendo a lo largo de los cuatro próximos años», subraya. 

En caso de que no pudieran devolverlo, el Ayuntamiento haría efectivo el aval quedándose con el dinero que corresponderia por la suerte de pinos a los beneficiarios.

De estos «adelantos sociales» podrían beneficiarse cerca de mil personas según los datos que maneja el Consistorio. «Ahora estamos acumulando el importe de unos cuantos años a futuro» concluye.