Un total de 45 pueblos de la provincia necesitaron suministro de agua para consumo de los camiones cisterna de la Diputación Provincial a lo largo del año pasado. El año 2022 se cierra con un total de 4.445.000 litros de agua  distribuidos.

La principal causa de la demanda de agua fue las averías en la red de abastecimiento, que generó la distribución de 2.044.000 litros, mientras que la sequía y la falta de agua de los acuíferos fue la responsable del consumo de 1.862.000 litros. Asimismo, la mala calidad del agua existente provocó el reparto de otros 128.000 litros.

Calatañazor fue la localidad soriana que más agua requirió, un total de 642.000 litros, tanto por falta  de agua como por averías. Le siguió Gómara, con 492.000 por avería; San Pedro Manrique por sequía, con 265.000 litros; Pinilla de Caradueña con 201.000 litros; Ventosa de San Pedro con 190.000 litros; Castilfrío de la Sierra con 174.000; Alcoba de la torre con 162.000; Cuevas de Ayllón 154.000; y Medinaceli 152.000 por avería.

El pasado año 2022 fue uno de los de mayor demanda de agua de la última década. En concreto, el tercero de la serie estadística, solo por detrás del año 2012, que se sitúa en un indiscutible primer lugar, con 13.765.000 litros, y tras 2016, en el que tuvieron que repartirse 6.245.000 litros.

En la última década, los tres años que menos agua hubo que repartir fueron 2014, con 841.000 litros, 2018 con 991.000, y 2020 con 1.278.500 litros, destacando sobre todo que la principal causa fueron las averías detectadas en la red de abastecimiento.

En la actualidad la Diputación Provincial tiene instaladas siete cisternas de 5.000 litros fijas en poblaciones que no disponen de agua de calidad, mientras se buscan soluciones o se terminan las obras para tener suministros alternativos en las localidades de La Miñosa, Mezquetillas, Utrilla, La Alameda, Valderrueda, Fuentecantos y Liceras.

La Diputación Provincial y la Junta de Castilla y León llevan a cabo todos los años obras de urgencia gracias al Plan Sequía, dotado con 200.000 euros, financiados entre ambas instituciones, para abordar los problemas más perentorios relacionados con el suministro de agua a las poblaciones.

Las obras incluidas en los diferentes Planes de Diputación abordan de forma preeminente y con mayor financiación si tienen relación con el ciclo hidráulico y cada año suponen una importante inversión por parte de ayuntamientos y de la propia Diputación.

En el Plan Diputación 2019 se destinaron 3.5 millones a obras hidráulicas, 3,1 millones en 2020 y 3,2 millones en 2021, lo que supone prácticamente destinar anualmente más del 40% de todas las obras incluidas en Planes Provinciales para mejorar el suministro de agua en los pueblos sorianos.