La calle A del polígono concentra las multas de velocidad

A.I.P.
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El resto de las multas se acumulan en la Avenida de Valladolid y Eduardo Saavedra. Apenas se registran incidencias el centro, con el límite a 30

La calle A del polígono concentra las multas de velocidad - Foto: Eugenio Gutierrez Martinez

Reducir la siniestrallidad de los usuarios vulnerables en la vías urbanas es el objetivo principal de los límites de velocidad que entraron en vigor en mayo del año pasado en las ciudades, de forma que en los tramos donde no hay diferencia de altura entre la calzada y la acera, la velocidad máxima permitida es de 20 kilómetros por hora, mientras que en aquellas vías de un solo carril por sentido, 30 kilómetros por hora, y cuando hay dos o más carriles por dirección, el límite se eleva a 50. Y parece que estos topes son respetados en el centro de la capital soriana, en general, por los conductores, ya que, según la información facilitada por el Ayuntamiento de Soria, apenas se interpusieron multas por superar los 30 kilómetros por hora. Así las cosas, en total se tramitaron 93 denuncias por velocidad en 2021 y las zonas con mayor concentración de sanciones fueron la calle A del polígono industrial Las Casas, que concentra el 40% de las multas, indican las mismas fuentes, la avenida de Valladolid y la calle Eduardo Saavedra. Se da la circunstancia de que en estas tres vías el límite de velocidad es de 50 kilómetros por hora, al disponer de dos carriles por sentido, y es en estos tramos donde se aprieta el acelerador.

En cualquier caso, la Cuesta de la Dehesa Serena, en el barrio de San Pedro, sigue acumulando un sustancial volumen de sanciones, aunque en este caso no son por exceso de velocidad, sino por saltarse el semáforo en rojo, un dispositivo que regula la velocidad en este tramo. En el ejercicio de 2021 se interpusieron 370 multas en ambos sentidos.

peatonalización. Por otra parte, el Ayuntamiento de Soria ha comenzado esta semana las obras de mejora del entorno de la iglesia de Santo Domingo, con una inversión de más de 250.000 euros. Esta intervención forma parte del plan de peatonalización de la ciudad y completa otras ejecutadas, como en la calle Condes de Gómara o en las travesías. La actuación, además de poner en valor el monumento románico, permitirá reducir el tráfico y, por consiguiente, la contaminación que afecta a la fachada, así como continuar con la trama urbana de las calles Doctrina y Santo Tomé.

Las obras tienen conexión con la rotonda de la carretera de Logroño que, una vez completada, permite el cambio de dirección dejando un solo carril junto a la iglesia. La intervención afecta a una superficie de 1.320 kilómetros cuadrados.