El tramo de la A-11 que discurre entre San Esteban de Gormaz y Langa de Duero, de 12,8 kilómetros, se abrirá a la circulación en las próximas semanas. A falta de los últimos trabajos de señalización, será el tercer tramo de la Autovía del Duero que se abra desde que en abril del año pasado se pusiera en marcha el de Santiuste - El Burgo.

El de San Esteban - Langa es un tramo que entra en funcionamiento once años después de que se adjudicase su obra, por 47 millones de euros. Un período "demasiado largo" para los vecinos de estos dos municipios, que han tenido que convivir a diario con las obras y con el tráfico de la Nacional 122. "Hace un año tuvimos que colocar un desvío porque la salida de Langa hacia Soria la hemos tenido cortada, y lo bueno es que ahora el tráfico no tendrá que entrar al pueblo", comenta Paco Barrio, el alcalde de esta localidad.

Muchos vecinos de estas dos localidades se muestran resignados ante un proyecto que para ellos "llega tarde". "Hace 30 años ya nos dijeron que de Soria a San Esteban íbamos a tardar media hora en autovía", lamentan algunos.