El Club Pelota Urbión busca seguir en la élite

EDS
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El equipo insignia de Pinares compite un año más con los mejores del panorama nacional y no se cierra a estar en playoff

El Club Pelota Urbión busca seguir en la élite

Lo importante no es llegar a lo más alto, sino mantenerse en la cima. Este dicho se lo toma al pie de la letra el Club Pelota Urbión. El orgullo de la pelota a mano de Pinares conseguía la temporada pasada la permanencia en la División de Honor de este deporte en su debut en la máxima categoría, siendo el único equipo que no pertenece al País Vasco, Navarra o La Rioja, «al final incluso nos supo a poco porque terminamos jugando mejor que lo que la clasificación marcaba», asegura Emilio Cabrerizo.

El presidente y jugador de la entidad considera superado el mayor escollo, el de ser novatos, «es cierto que pagamos la inexperiencia y que nos costó entrar en ritmo en la primera vuelta de la competición pero ahora eso ya pertenece al pasado». 

Con un equipo más completo y alguna incorporación procedente de Navarra, han dado un fondo de armario más que necesario para poder afrontar la temporada que comienza este domingo con la mayor de las ambiciones. «Vamos a disfrutar», y ese mensaje, bien interpretado, significa que podrán competir nuevamente con los mejores pelotaris del país.

Más jugadores. Uno de los mayores problemas que el Club Pelota Urbión tuvo en el pasado fue una plantilla muy justa de efectivos que generó muchos inconvenientes, «solo contábamos con un zaguero que además se lesionó». Esta situación obligó «a cambiar a otros compañeros de posición y adaptarse a un rol diferente que nos perjudicó y no nos dejó mostrar todo nuestro potencial».

Este año aumenta la plantilla a seis jugadores, «son dos más porque con la situación sanitaria es mejor tener más pelotaris por si ocurre cualquier inconveniente». Además cuentan con un fichaje estrella, el navarro Diego Iturriaga, «es una gran incorporación», reconoce, «tiene talento, experiencia y un gran compromiso con nosotros, la verdad es que agradecemos mucho que esté dispuesto a competir en nuestro club».

Los jugadores foráneos son más que necesarios para competir en la élite, «hay que reconocer que sin ellos sería imposible». El mejor representante de los pelotaris de pinares será nuevamente Luis Cabrerizo, «es el que compite con Iturriaga y cuatro guipuzcoanos». La tarea para captarlos es ardua, «les es más sencillo competir cerca de casa porque tienen más facilidad para fichar por otros o cambiar de equipo, pero a base de un sentimiento de club conseguimos consolidarnos».

Complicado es también entrenar, «con las limitaciones de movilidad cada uno tiene que entrenar por su cuenta lo que provoca que no podamos mejorar a nivel grupal, aunque me consta que todos están trabajando de forma adecuada para conseguir llegar en óptima forma al inicio de la competición».

La crisis, aunque pueda parecer ilógico, ha aumentado el nivel de la competición, «es importante entender el contexto de este deporte», explica Cabrerizo, «en el Norte las ligas de empresa son muy importantes pero ahora han desaparecido algunos equipos, lo que ha hecho que los pelotaris fichen por conjuntos de la División de Honor». 

El nivel será más alto pero eso no resta ni un ápice de ambición en los de Pinares, «solo nos faltaba la experiencia y ya la tenemos, creo que puede ser un gran año». El objetivo es la permanencia, «debemos estar en esta categoría para sobrevivir porque económicamente tener a jugadores foráneos sería insostenible».  A partir de ahí está permitido soñar, «no nos cerramos a estar en las semifinales por el título, creemos que podemos conseguirlo y debemos confiar en esa posibilidad». 

Todo comienza este domingo pero para que el Club Pelota Urbión siga con los mejores hay que trabajar por el futuro. Y en esto, también han dado un paso más.

Filial. Competir en División de Honor requiere de una exigencia que puede pasar factura a las jóvenes promesas del club, «es un salto demasiado grande y además no se les garantizaba jugar habitualmente». Crear un filial era vital, «por él pasarán a partir de ahora todos lo que superen la edad juvenil y además todos serán siempre de nuestra zona de Pinares».

Forman parte de este grupo algunos veteranos del club que se mezclan con los nuevos talentos, «sirve de formación en el día a día y además se les ofrece la oportunidad de competir a un gran nivel». Los que destaquen, «pueden incluso jugar en alguna ocasión con el primer equipo, un premio a su dedicación».

La temporada pasada cinco pelotaris estaban a punto de dar ese salto aunque ahora «no pueden entrenar». Esta situación provocada por la pandemia «hace que pierdan un año y de momento seguirán en este filial a la espera de coger ritmo y nivel».

La supervivencia en la máxima categoría pasa precisamente por la consolidación de este segundo equipo, «no podemos fichar siempre jugadores de otras comunidades y conseguir que algunos de nuestros pelotaris den el salto desde el filial sería muy importante para mejorar deportiva y económicamente». 

La escuela sigue sobreviviendo con 20 canteranos, el futuro de la pelota a mano de Pinares que mira con ilusión el poder estar en el futuro en la División de Honor. De momento son dos temporadas en la élite, pero el Club Pelota Urbión quiere más.