Pinares Food Truck, el negocio de emprendimiento de Sergio Lafuente que vio la luz con el apoyo del Semillero de proyectos, se adhiere a las peticiones de este tipo de establecimientos a nivel nacional. Como este año no se han organizado los actos a los que él acudía, como fiestas y conciertos, entre otros, también tiene el negocio parado. Sin embargo, acude a prestar servicios de cocina en el bar Maneras de Vivir de Almazán (solo bocadillos y hamburguesas para llevar del foodtruck).
El movimiento #SalvemosALosFoodtruck reclama a las áreas de Comercio y Consumo de todos los consistorios que modifiquen y se les incluya en la ordenanza de vías y espacios públicos «para poder realizar nuestra actividad como lo hacen las churrerías, puestos de castañas y quioscos de helados». «En este momento nuestro servicio es necesario en muchas ciudades y cumplimos todos los requisitos sanitarios para poder trabajar en espacios abiertos y al aire libre», apuntan desde este movimiento surgido en Estados Unidos, desde el que reclaman un mayor reconocimiento y lamentan que para poder trabajar en estos meses han tenido que recurrir a operadores privados. «Ahora es la oportunidad de que la administración nos deje operar en la calle, somos un sector de bajo riesgo para los contagios, nos podemos desplazar a zonas donde la hostelería no tiene take-away», por lo que piden concretar con los ayuntamientos horarios y ubicaciones. Durante el confinamiento prestaron sus servicios «de forma altruista» en hospitales y mercados de diferentes ciudades, «para demostrar que somos solidarios y útiles en los momentos que nos dan un espacio para cocinar».
Establecimientos de este tipo hay más en ciudades grandes, como Madrid y Barcelona, donde más presión se está haciendo, pero en Soria Sergio ha sido pionero y quiere mantener su proyecto, en el que puso toda su ilusión para poder quedarse a vivir en su pueblo, Covaleda. Desde allí, cuando puede se mueve de un lugar a otro, donde reclaman sus servicios, tanto en Soria como en provincias limítrofes. «Estamos intentando que se nos deje colocarnos como otro comercio más, pagando nuestros impuestos», apunta el emprendedor. «Ahora, según está la legislación, no se puede», añade Sergio.
nuevo proyecto. Ahora Sergio está iniciando un negocio online «para poder seguir adelante», concretamente de venta de iluminación, colchones, productos químicos... «No es tan difícil de montar porque no hay que hacer tanta inversión como en el foodtruck», comenta. El proyecto se denomina Pinares Shop y abrirá en breve y cuenta con distintas secciones (incienso y quemadores, hogar y decoración, cuidado corporal y belleza y flores de jabón).
En torno a la web, una novedad es que junto a RCSoria, un grupo de jóvenes apasionados de las nuevas tecnologías, van a crear regalos únicos para Navidad, como bolas de nieve personalizadas y colgantes. Usando su creatividad, los elaborarán con madera, metacrilato y resinas. «Estamos buscando cosas originales y que se puedan hacer personalizadas, poniendo nombres de las personas a las que se va a hacer el regalo», al tiempo que los nuevos productos se ofrecerán en la web recién creada para ello.