El alcalde de Soria, Carlos Martínez, acusó al presidente de la Junta de Castilla y León, Carlos Martínez, de dar un "manotazo" a la provincia, tras admitir que no aplicará ni fiscalidad diferenciada y no reconocerá la situación de la provincia con respecto al resto porque Castilla y León es "una". 

"No podemos esperar un reconocimiento especial, porque ya dijo que Castilla y León es una y, por tanto, da igual Valladolid que Burgos, porque, según él, para todos hay que hacer lo mismo", criticó, para señalar que, además, exige que el Gobierno sí que haga una diferencia con Soria, que la Junta "no tiene intención de hacer".

El regidor soriano admitió que existen "errores en la comunicación" por parte del Gobierno con respecto al porcentaje de las ayudas al funcionamiento que recibirán los autónomos y su retroactividad, e insistió que deberán clarificar de "forma detalla" los términos, pero lamentó las críticas que ha recibido la puesta en marcha de estas ayudas.

Asimismo, criticó que el PP ponga el foco de forma permanente en los puntos, comas y puntos y seguidos que hacen los ministros, ya que es estar "permanentemente en una trampa" en la que se pretende incluir a "algunos" para no hablar de "su gestión".

En este sentido, defendió las medidas que distinguen a Soria de otras provincias, y exigió que se valoren con justicia. Además, precisó que, según los cálculos, que establecen que el mínimo de reducción de cualquier cotización de cualquier empresa soriana va a ser de 150 euros con respecto a otra provincia del entorno, y de 377 con respecto a Madrid.

Martínez aseguró que echa en falta que se hable de ventajas para las empresas pero no de la repercusión que estas ayudas deberían tener para los trabajadores, y arremetió contra el Gobierno autonómico por evitar aplicar la fiscalidad diferenciada para Soria cuando la exige, constantemente, al Ejecutivo central.