El presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, anunció hoy que las provincias de León y Salamanca abrirán este viernes, 4 de diciembre, la hostelería, centros comerciales y gimnasios, que el resto de provincias se podrá unir en la semana siguiente y que se permitirá con carácter general la apertura de las terrazas de bares y restaurantes, si las asociaciones están de acuerdo, aunque confirmó que se prorrogará el cierre perimetral de la Comunidad. 

Fernández Mañueco, que compareció a petición propia ante el pleno de las Cortes, indicó que el Consejo de Gobierno aprobará los cambios para León y Salamanca este jueves y manifestó que se estudiarán si otras provincias cumplen los criterios fijados, como que la incidencia sea menor de 400 casos por cada 100.000 habitantes. No obstante, el resto de provincias de la Comunidad dejarán atrás las restricciones del 6 de noviembre la siguiente semana, siempre que la evolución de la pandemia lo permita.

También, el presidente indicó que este jueves se reducirán algunas de las medidas excepcionales de la ciudad de Burgos, de forma que las limitaciones a reuniones se fijarán en seis personas, frente a las tres actuales, y las limitaciones al culto pasarán de 15 personas al 50 por ciento del aforo.

Igualmente, Fernández Mañueco señaló que ofrecerán a la hostelería de las provincias donde todavía no pueden trabajar la apertura de las terrazas, una alternativa que recordó ya ofreció al inicio de noviembre y que las organizaciones patronales rechazaron.

El presidente de la Junta recalcó que tanto León como Salamanca, como Ávila y Segovia, que levantaron las restricciones a la hostelería, el comercio y el deporte la semana pasada, siguen en el nivel 4 de alerta, el máximo, por lo que se mantiene el cierre perimetral de la Comunidad. Además, Fernández Mañueco destacó la tendencia de la pandemia a la baja, mientras la positividad de las pruebas es del diez por ciento y la incidencia acumulada es de unos 550 casos por cada 100.000 habitantes en 14 días.

También el jefe del Ejecutivo autonómico señaló que las pruebas de antígenos de segunda generación será la principal en Atención Primaria y urgencias para detectar el COVID-19. "Habremos cometido errores", dijo Fernández Mañueco, quien recordó que el objetivo fundamental ha sido proteger a las personas, la "defensa de la vida" y de la salud.

Cuatro ejes

El presidente inició su intervención con un mensaje de cercanía a los familiares de las víctimas, a los que sufren por sus negocios, a los profesionales y al esfuerzo de todas las personas, ante la “fatiga pandémica” esta segunda ola de la pandemia. También, reiteró que se cumplen las medidas del pacto para la recuperación. 

Como autoridad delegada del estado de alarma, desgranó las actuaciones de su Gobierno en cuatro ejes: contención social, refuerzo de la sanidad, protección social y refuerzo de la educación y apoyo económico para minimizar el impacto del COVID e iniciar la recuperación.

Tras repasar los datos de contagios, que obligaron a tomar una serie de medidas restrictivas a partir del 16 de octubre, con límites de aforo, cierre perimetral y clausura de sectores como la hostelería, aseguró que, “gracias al esfuerzo de todos”, en las últimas dos semanas se han superado los “momentos más críticos” en todas las provincias, si bien apostó por mantener la guardia para evitar los rebrotes.

El presidente de la Junta defendió que se ha reforzado la sanidad, que en el próximo presupuesto ya representará el 7,5 por ciento del PIB, con más rastreadores, más equipos de protección y más contrataciones, que superan las 11.000, a la vez que insistió en que el decreto de los sanitarios no tiene efecto sin acuerdo y llamó de nuevo al diálogo a los sindicatos del sector.

Por otro lado, sostuvo que el curso se ha iniciado de manera presencial y segura con un uno por ciento de aulas confinadas y ningún colegio cerrado y miró también a las residencias para recordar la puesta en marcha del COVID residencias y los cribados de las aguas residuales, así como que el grupo de trabajo ha realizado sus propuestas que se recogerán en la futura ley, para lo que invitó al consenso de los grupos.

Desde el inicio de la pandemia, defendió el presidente que su Gobierno ha habilitado ayudas para pymes, autónomos, trabajadores y sectores más afectados, donde se refirió al cierre de la hostelería para subrayar que se pactó con el sector, lo que motivó la desaprobación desde la bancada de la oposición, y señalar que se clausuró más tarde que en otras comunidades.

Fernández Mañueco aseguró que las medidas acordadas en el mes de marzo están en marcha y en ejecución y las firmadas en noviembre, donde se encuentra el plan de choque por el empleo con 82 millones, también tiene cinco convocadas. Así, se refirió a los 290 millones que moviliza el último plan suscrito con el diálogo social, entre ayudas directas y liquidez.

El presidente de la Junta, que recordó que la vacuna abre un “horizonte de esperanza”, consideró que existe un “largo camino para la recuperación”, aunque estimó que Castilla y León parte en mejor posición con una menor caída de su PIB en 2020 y una tasa de paro inferior en cuatro puntos a la media nacional.

Por último, convocó a todas al diálogo y advirtió de que, “si alguien no quiere”, será por “su voluntad”, ya que el Gobierno de Castilla y León mantiene la “mano abierta”.