Cerámicas de la vida para la muerte

EDS
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Las piezas se hallaron en una tumba neolítica en Fuencaliente de Medina

Cerámicas de la vida para la muerte

Estas cerámicas, algunas de ellas conocidas como campaniformes, por su forma, aparecieron acompañando a los muertos enterrados  sobre una tumba anterior, neolítica, en un yacimiento de Fuencaliente de Medina.

Esta tumba es constructivamente compleja durante el Neolítico ya que tras su construcción para enterramientos colectivos se quemó intencionadamente y después, sobre ella, se construyó de nuevo con intención funeraria. Más tarde, aquella población calcolítica que ya conoce el cobre y cuya vajilla cerámica se caracteriza por ser campaniforme, enterró a varios individuos en la entrada de la cámara funeraria neolítica. 

Hay dos cuestiones altamente interesantes. La primera es la intención de continuar ocupando un  espacio funerario, sacralizado. Se ha interpretado que la razón es que estos nuevos grupos legitiman su poder al utilizar con continuidad estos espacios de una cultura anterior. Las monumentales tumbas del neolítico se instalaron en lugares prominentes del paisaje señalizando un territorio y las rutas que el grupo humano transitaba pues su hábitat no era aún plenamente estable y permanente.

Cerámicas de la vida para la muerteCerámicas de la vida para la muerteLa segunda cuestión es que en el calcolítico los enterramientos serán individuales, no colectivos como lo fueron durante el neolítico en las grandes construcciones megalíticas. Esta diferencia revela cambios sociales importantes: dentro de los grupos humanos se distingue al individuo, al yo, obviamente como construcción psicológica y social muy diferente a la nuestra. Con seguridad el individuo se definía en relación al ser y  al estar de su familia y grupo humano al que pertenecía  e incluso al territorio que ocupaba o en el que transitaba. Pero ya no existía diluido o estrictamente sumado en el grupo humano. 

Los ajuares que acompañan a los individuos enterrados son los objetos que les parecieron necesarios para la otra vida. Con seguridad se enterraron con otros objetos, perecederos, que el tiempo destruyó. Pero demuestran de un modo nuevo la intención de señalar el prestigio personal así como la existencia de una ideología que legitima el poder individual.

Tres de estas cerámicas se recuperaron en una tumba: el individuo se halló en posición semifetal, apoyado sobre el costado izquierdo y con los brazos cruzados sobre el pecho, posición habitual en esta época. Dos se hallaron tras sus piernas y una tercera abrazada entre sus brazos y el pecho. El ajuar funerario se componía además de un botón de hueso cónico, una punta de flecha de arco de sílex y fragmentos de lezna de cobre. El segundo enterramiento, en que el muerto tenia la misma posición, conservaba como ajuar un brazal de arquero, una cazuela de pequeño tamaño y un puñal de lengüeta de cobre. 

Cerámicas de la vida para la muerteCerámicas de la vida para la muerteLos análisis de residuos en las paredes de las cerámicas campaniformes han dado como resultado que los vasos contuvieron un tipo de  cerveza y las cazuelas grasas animales de comida sólida. Estos análisis se realizaron mediante microscopía óptica de alta resolución, microscopía electrónica de barrido con microanalizador de rayos X (EDX) incorporado y la técnica combinada de cromatografía de gases/espectrometría de masas y un espectrómetro de masas así como técnicas inmunoquímicas

Se ha interpretado que estos individuos, que tiene un poder y un prestigio en proceso de consolidación, realizarían banquetes a través de los cuales obtener la adhesión del grupo sobre el que se erigían. Banquetes de hospitalidad o de celebración civil o religiosa. Todo ello confirma que la segunda mitad del III milenio a.C (2500 – 200 a.C.) es un periodo crítico de gran complejidad social, política y  religiosa. Gracias a un gran trabajo  desarrollado por M. Rojo y su equipo en el amplio Valle  de Ambrona tuvimos conocimiento de todo ello.

Cerámicas de la vida para la muerte
Cerámicas de la vida para la muerte
Este conjunto de cerámicas se halla actualmente formando parte de una gran exposición temporal, monográfica, sobre el fenómeno campaniforme en el Museo Arqueológico Regional de la Comunidad de Madrid  mediante un préstamo del Museo Numantino en donde se conservan.