"En Soria hay una especie de microclima en la economía"

Ana Pilar Latorre
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La falta de industria manufacturera en Soria también tiene sus ventajas, como que las deslocalizaciones no afecten al empleo. La economista apuesta por la tecnología 4.0 en empresas nuevas y tradicionales y en recuperar el talento que se pierde

"En Soria hay una especie de microclima en la economía" - Foto: Eugenio Gutierrez Martinez.

Con otros economistas, Mercedes Ciria Berzosa ha impulsado la sección de Soria del Colegio de Economistas de Madrid, que será nexo de unión entre los profesionales de esta rama. Asegura que la economía soriana se encuentra ahora en crecimiento sostenido, celebrando la previsión del Observatorio Económico de Caja Rural de Soria. 

Ahora que se habla ya de recuperación económica, aunque la crisis ha dejado tocados a muchos sectores y ciudadanos, ¿qué riesgo hay de una nueva desaceleración?

La desaceleración económica viene dada, fundamentalmente, por problemas internos y externos. Las medidas tomadas en comercio exterior por determinados gobiernos, como el de Donald Trump en Estados Unidos, afectan a las exportaciones de Soria. En cuanto a cuestiones internas, la situación política y no tener presupuestos no beneficia para nada a la economía soriana. Yo siempre diferencio entre la microeconomía, en la que a los demás les puede ir mal pero a mí me puede ir fenomenal; y la macroeconomía, que afecta a todos de una manera o de otra, como pueden ser las medidas impuestas por el gobierno de Trump.

¿Cómo afecta esta situación internacional de la guerra comercial Estados Unidos-China, el Brexit y la desaceleración en la zona euro a las inversiones y al consumo?

El consumo se ralentiza porque el ciudadano piensa en el ‘por si acaso’, que es terrible porque no se toman determinadas decisiones que afectan a la economía. Lo mismo pasa en las inversiones, ya que las empresas tienen mucho más miedo para invertir, aumentar la producción.En sectores como el agroalimentario, con medidas totalmente arbitrarias y restrictivas de gobiernos como Estados Unidos, que ha abierto una guerra comercial muy peculiar, las empresas se ven coartadas a la hora de realizar inversiones, de contratar nuevos trabajadores, de mejorar sus plantas para producir de una manera más eficiente y más efectiva. Todo ello desacelera la economía. En el sector tecnológico, como enSoria no hay industria, no hay especial incidencia.   

Respecto al Brexit, supone una incertidumbre absoluta, que afecta tanto a empresas como a las personas que viven allí. A la economía soriana puede influir en cuanto al sector vitivinícola, ya que Reino Unido es un enorme importador de vinos, por lo que puede afectar a empresas que comercializan con ese país. Creo que, al final, primará el sentido común y la racionalidad, porque la salida de Reino Unido de la Unión Europea afecta a todo el mercado y confío en la capacidad de solucionar la situación. Allí, se asumirá el sobrecoste que siempre se ha asumido, porque allí los productos son excesivamente caros. Toda la economía, al final, se estabiliza, es decir, los grandes problemas confluyen de alguna manera para que al final se alcance el equilibrio necesario.

Ahora en la Unión Europea, el Banco Central Europea tiene una nueva presidenta, Christine Lagarde, que creo que va a plantear la continuidad de medidas de su antecesor, Mario Draghi. Es lo que se espera. Seguimos con tipos de interés muy bajos que sí que facilitan la inversión, pero el problema serán las medidas de comercio internacional que puedan dañar a determinados sectores, para lo que se han de tomar medidas. La UE tiene una clara responsabilidad en la política monetaria y de economía circular, además de otros valores que hay que mantener. Siempre hay que hablar en positivo. Una nueva recesión económica es probable, pero opino que no va a ser tan contundente como la anterior crisis, primero porque no estábamos concienciados de lo que podía suceder y ahora estamos preparados. 

¿El alarmismo afecta también a la economía?

Sí.Al final, si siempre hablamos de crisis y de despoblación con ese victimismo nos quedamos en ello, siempre quejándonos por lo mismo y llorando por lo mismo, sufriendo las mismas consecuencias. Creo que el diálogo tiene que ser en positivo, porque si se traslada lo positivo al final tú mismo te autoconvences de ello. Siempre hablamos crisis, de crisis política, crisis poblacional y crisis económica, que es la mezcla de todo lo que sucede a nuestro alrededor y no una cuestión que de repente el dinero vale menos, lo que tenemos alrededor sufre colateralmente. 

Si seguimos con ese victimismo, desde mi punto de vista, no se consigue nada positivo en cualquier parcela de la vida. Lo importante es tener una visión positiva, evitar la confrontación y unir fuerzas para que revierta en la sociedad y la economía.  

¿Cómo influye la situación política actual, a la espera de formación de Gobierno Central? ¿Cómo han afectado medidas económico-laborales como el aumento del Salario Mínimo Interprofesional (SMI)?

No tener presupuestos no afecta absolutamente a todos. La indignación se ha reflejado en las urnas y se ha reclamado a los políticos que se sienten a hablar y sean consecuentes, al margen de personalismos, para que el país tenga una estabilidad política. A muchas empresas les está afectando esta situación.

La medida de la subida del SMI a 900 euros en 2019 generó un tsunami en muchas empresas, con un coste adicional muy importante para su situación económica y disminución de ingresos. Pero los datos del paro también están ahí y se ha estabilizado, aunque había poco volumen de trabajadores por debajo de ese umbral. Es cierto que son trabajos muy poco cualificados y puede que no haya sido una medida del todo equitativa, porque ahora mismo hay muchos convenios que equiparan trabajadores con mayor conocimiento con trabajadores con menores conocimientos pero con el mismo salario. En las negociaciones colectivas se irá solucionando, ya que no todos se han negociado en 2019. Habrá empresas que tengan trabajadores con unos conocimientos más altos percibiendo el mismo salario que trabajadores con menos años de experiencia y formación. Pero el mercado de trabajo yo creo que más o menos ha absorbido esta medida, que ha afectado a las cuentas anuales de bastantes empresas.

¿Cómo valora los resultados del Observatorio Económico de Caja Rural de Soria, que mantienen la previsión de crecimiento en la provincia e incluso por la media regional y nacional?

Los últimos datos que tenemos del Observatorio Económico de Caja Rural son alentadores, pero porque parece que siempre vamos unos pasitos por detrás y siempre los problemas económicos, como la desaceleración o la recesión, nos llegan más tarde. En Soria hay como una especie de microeconomía dentro de la economía nacional e internacional. Al final, nos movemos por medidas diferentes y a Soria llega más tarde la crisis y se dice que se tarda más en salir de ella, algo en lo que yo discrepo en algunos casos. Situaciones como el aumento del paro no nos han afectado como a otras regiones, no es comparable.

Influye la situación política un poco más estable en la provincia y que las empresas sorianas sí que exportan, algo que se refleja en el Observatorio Económico de Caja Rural, aunque las importaciones han disminuido. Soria funciona en esa especie de microeconomía o microclima que es más beneficioso. Al no tener un sector industrial muy fuerte y basarse la economía más en el sector servicios y primario no se han sufrido deslocalizaciones como en otras zonas. Lo que a veces son inconvenientes tiene su parte de ventaja. Y como tenemos muchas infraestructuras pendientes hay muchas obras abiertas, con lo que eso es empleo. Hay que ver el punto positivo.

¿Cómo define la economía de la provincia de Soria?

Como decía, creo que tenemos esa balsa o microclima, y que la economía está creciendo en la provincia, como recoge el Observatorio Económico de Caja Rural. Las cifras de paro son bajas y refleja la situación de la provincia. Lo único es que para encontrar trabajadores para determinados puestos es más complicado. Y también tenemos una salida de talento en la provincia muy importante y lo que se debería intentar es atraer empresas y trabajadores que se beneficien de este bienestar social y económico de Soria, porque estamos a un paso de la capital y hay enormes posibilidades de teletrabajo, trabajo a distancia y otras opciones. Si tenemos los recursos de infraestructuras en cuanto a telecomunicaciones e internet válidos, en muchos puntos de la provincia de podría dar la circunstancia de atraer trabajadores de empresas que necesitan tiempo y, sobre todo, relajación para trabajar. 

¿Cuáles son los sectores más pujantes en la actualidad?

La economía soriana está en crecimiento sostenido y lo que falta es producción manufacturera, porque es escasa y la economía soriana se basa fundamentalmente en el sector primario, con agricultura y ganadería, y en el terciario, con transporte con una empresa de las más grandes de España y un gran número de trabajadores. En turismo rural hay un enorme potencial, relacionado con una enorme riqueza natural y patrimonial, que se debe poner adecuadamente en valor. Destaca el sector agroalimentario, con empresas muy fuertes, como Copiso, y pequeñas empresas familiares que han ido evolucionando y creciendo. Hay que hablar de la industria de la madera y de la recuperación de la industria de la resina, que considero que es importantísimo.

Hay multinacionales, pero no se llega al volumen de trabajadores que hay en otras localidades cercanas, como puede ser el ejemplo de Aranda de Duero, donde se ha basado la economía en tres pilares de tres industrias y en el momento en que caiga una afecta a toda la localidad. Norma fue otro ejemplo, porque toda la comarca dependía de esa industria. Soria, en ese sentido, ha podido sostener mejor la producción, porque las empresas no son de gran tamaño en Soria capital y provincia, lo que es positivo. En mi opinión, es mejor optar por la diversificación de la economía y la industria, no poner todos los huevos en la misma cesta.

Por zonas, destaca la actividad en Soria capital, el Moncayo con gran crecimiento a nivel industrial y la resina y agroalimentación, con el regadío, principalmente, en Almazán. Hay una gran diversidad, con zonas agrícolas y el pulmón en las zonas Pinares con recursos maderables y biomasa, así como el marchamo de Madera de Pino Soria-Burgos... Hay una serie de valores que hay que afianzarlos. 

En toda la provincia, de El Burgo de Osma hasta el Moncayo, tenemos una especie de eje en empresas complementarias del sector del automóvil, a medio camino entre Valladolid yZaragoza, dos puntos con industria automovilísticas muy importantes. Por ello, se debe aprovechar la ubicación para nutrirla. Una mejor infraestructura para viajar a Portugal, el norte de España y Francia beneficiaría tremendamente.Es el caballo de batalla desde tiempo inmemorial. Solo los romanos se dieron cuenta de que éramos la ruta norte, pero el centralismo hacia Madrid no nos benefició para nada, eso de que todas las carreteras tengan que pasar obligatoriamente por el centro.

¿El movimiento comercial es de vital importancia?

Sí, las exportaciones son de gran importancia para la economía provincial. Están aumentando y los productos que más se destinan al exterior desde Soria son papel, cartón y manufacturas.

¿Cuáles son en los que más mano de obra se genera?

Creo que en el sector terciario y transporte y el sector agroalimentario a la cabeza. A ello se suma el sector de la madera. Descienden, sin embargo, los afiliados a la Seguridad Social en servicio doméstico e ingeniería civil.