El Burgo asume el tramo urbano de la SO-160

Redacción
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A cambio, la Junta de Castilla y León fresará y pavimentará las tres calles afectadas. Fruto del mismo acuerdo, también se reparará la calle Acosta aunque la SO920 no entra en el intercambio.

El Burgo asume el tramo urbano de la SO-160

El Burgo de Osma-Ciudad de Osma asumirá el tramo urbano de la carretera SO160, hasta ahora propiedad de la Junta de Castilla y León. Así se acordó en el último pleno ordinario y así se ha pactado con el organismo regional. A cambio, la Junta se ocupará de poner a punto las calles afectadas para entregarlas a la localidad en perfecto estado.

El tramo urbano de la SO160 discurre desde la travesía de la nacional 122 por la calle Marqués de Vadillo, Rodrigo Yusto y Daniel García Moral hasta desembocar en el paseo peatonal que baja hasta La Güera. Ahora, la Junta tendrá que fresar y pavimentar esas tres calles para que, cuando las entregue formalmente a la localidad, estén en perfectas condiciones.

Además, mediante el acuerdo alcanzado entre las instituciones, el organismo regional también se hará cargo de fresar y pavimentar el tramo urbano de la SO920. Esta última carretera no entra en el acuerdo de cambio de titularidad pero sí se ha logrado el compromiso de la Junta para intervenir en ella. La zona urbana de la SO 920 se corresponde con la calle Acosta, desde la entrada en la localidad llegando desde San Leonardo de Yagüe hasta la unión con la travesía de la nacional 122. La calle Acosta es una zona de gran tráfico de vehículos y peatones puesto que en ella está el Centro de Salud, la Residencia San José y es acceso al Instituto Santa Catalina y el Colegio Público Manuel Ruiz Zorrilla.

El alcalde de El Burgo de Osma, Antonio Pardo, reconoce que la asunción de esa travesía tiene algunos puntos que podrían ser conflictivos como la zona del paseo peatonal donde hace algunos años se desprendió una piedra de grandes dimensiones. Recuerda, que entonces el camino estuvo cortado durante muchos meses y que lo que hay que hacer es "dar respuesta a los ciudadanos, no hay que tener miedo, los vecinos lo que quieren es que se resuelvan las cosas". Añade que "si un día se cae una piedra y no tenemos posibilidades económicas para arreglarlo buscaremos ayudas donde sea".