Después de tres años de paréntesis a causa de la pandemia, volver a 'engrasar la maquinaria' de la Semana Santa soriana está resultando un proceso mucho más laborioso de lo que se estimaba en un primer momento. Pero hay «muchas ganas» y éstas prevalecen sobre la «pereza» de preparar el hábito después de tanto tiempo. Pesa también, afirma Daniel Madrid, presidente de la Junta General de Cofradías de la Semana Santa de Soria, la responsabilidad de que todo salga bien y que se consiga atraer a muchos visitantes a la ciudad para paliar unos años que han sido duros para el sector de la hostelería.
Pero más allá de lo mundano, esta celebración «habla de cosas muy íntimas que se viven muy dentro con mucho sentimiento», insiste el presidente de la Junta General de Cofradías. Al fin y al cabo, señala, la Semana Santa «es un mensaje con un emisor, que somos nosotros, y un receptor, que es el público». Con las emociones cofrades «a flor de piel», la Semana Santa de Soria presentará oficialmente su programa el próximo jueves 31 de marzo en el Casino Círculo Amistad Numancia.
La evolución de la pandemia de covid-19 marcará en última instancia su celebración y aunque las hermandades penitenciales han seguido en este tiempo la evolución y los datos de la pandemia con cierto vértigo y estupor (especialmente con la explosión de la sexta ola durante las Navidades), las expectativas son optimistas en cuanto a que las procesiones y demás eventos religiosos que componen la Semana Santa puedan celebrarse sin problemas. De hecho, la Junta de Castilla y León sólo ha marcado como única prescripción el uso de mascarilla en zonas de aglomeración de gente durante la celebración de las procesiones. En cuanto a las misas y otras ceremonias religiosas que se celebran en el interior de las iglesias, podrán realizarse igualmente sin restricciones, puesto que ya no existen limitaciones de aforo.
Si no cambia nada de forma brusca, señala Daniel Madrid, todo se celebrará según lo planificado por la Junta General de Cofradías, que lleva ya trabajando de forma intensa en los preparativos desde finales 2021. Aún así, algunas cofradías tienen preparadas varias alternativas (mascarillas para los cofrades, evitar que los instrumentos de viento toquen en tramos estrechos y concurridos del recorrido, test de antígenos para los alzadores...) por si fuera necesario. El objetivo es no dejar nada al azar y que sólo la meteorología pueda ser la causa de la suspensión de los cortejos procesionales este año.
«Estamos tranquilos. Si toca, cumpliremos lo que se nos pida, que entendemos que será bastante razonable» porque, insiste el presidente de la Junta General de Cofradías, en realidad, el festejo cumple de por sí con muchas medidas anti-covid que se han hecho familiares ya a lo largo de estos dos años de pandemia como mantener la distancia de seguridad entre los desfilantes o llevar cubiertas nariz y boca (salvo en la bandas musicales de viento), entre otras.
En este sentido, no habrá grandes cambios de itinerarios más allá de los que ya estaban previstos en la edición de 2020, que tuvo que ser suspendida tras declararse el primer estado de alarma. «El centro de Soria, El Collado y Mariano Granados, es ancho». El único problema podría encontrarse en el Casco Viejo «que no ofrece muchas alternativas». En este caso, apunta Daniel Madrid, se confía en el «sentido común» de los espectadores con el uso de la mascarilla. Entre los cambios de recorrido se incluirán nuevos tramos por la calle Real, en sustitución de la calle Postas, en el caso de la Cofradía de la Entrada de Jesús en Jerusalén, la popular Borriquilla, el Domingo de Ramos, y la sustitución de la calle Las Fuentes por San Juan también en el camino de vuelta del cortejo procesional de Las Caídas de Jesús a la concatedral de San Pedro el Jueves Santo. Serán modificaciones muy pequeñas. «La gente no notará la diferencia después de tres años», comenta el presidente de la Junta de Cofradías.
una nueva etapa EN LA JUNTA DE COFRADÍAS
Para Daniel Madrid será la primera Semana Santa con procesiones desde que ostenta el cargo, pues tomó el relevo como presidente del organismo que coordina la Semana Santa de Soria en el año 2020. Estos dos años, asegura, han sido complicados. La entidad ha tenido que adaptarse a la pandemia y, en cierta forma, 'reinventarse' con actividades alternativas a las procesiones. Este año, por ejemplo, el tradicional concurso-exposición de fotografía ha sido sustituido por una muestra dedicada a carteles históricos de Semana Santa. Desde principios de año los preparativos se han acelerado según se iba imponiendo «la esperanza» de celebrar con 'normalidad' la Semana Santa.
«Vamos con la lengua un poco fuera con tantos detalles, pero tenemos ganas de que salga una cosa bonita, a la altura, porque hay mucho sentimiento pendiente de salir y nos parece fundamental también que la gente recupere un poco la actividad, la normalidad», insiste Madrid.