Saturnino de Gregorio se convirtió en la llave de la gobernabilidad al dar su apoyo al pacto entre Partido Popular y PPSO y formar un tripartito en la Diputación de Soria. Este lunes tras el anuncio de Mañueco de adelantar las elecciones y el cese de los consejeros de Ciudadanos, De Gregorio ha presentado su renuncia como vicepresidente primero de la Diputación de Soria. Un movimiento que puede afectar a la estabilidad del equipo de Gobierno provincial liderado por Benito Serrano.
El diputado provincial trasladó al actual presidente de la Diputación, Benito Serrano, que por "coherencia política" dimitía del cargo, y le garantizó que, no obstante, no afectará al gobernabilidad del PP y la Plataforma por el Pueblo Soriano, según destacó esté último.
De Gregorio es el secretario del Ayuntamiento de Golmayo, localidad gobernada por el PP con Benito Serrano de alcalde.