Sánchez se abre a poner más control judicial al CNI

Agencias
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El presidente muestra su empatía con los espiados "sin permiso" de un juez y Aitor Esteban le aconseja que se "asegure bien" de que las Fuerzas de Seguridad no tienen acceso a Pegasus

Sánchez se abre a poner más control judicial al CNI - Foto: JUAN CARLOS HIDALGO

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se ha mostrado dispuesto este miércoles a estudiar la iniciativa planteada por el PNV para incrementar el control judicial sobre el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) y ha verbalizado su "empatía" con las personas que, como él mismo, han sido espiadas con el programa 'Pegasus' "sin permiso judicial", lo que excluiría a los independentistas investigados por el CNI con autorización del Supremo, como el presidente catalán Pere Aragonés.

Así lo ha señalado Sánchez en el Pleno del Congreso en respuesta al portavoz del PNV, Aitor Esteban, quien le ha pedido que se asegure "bien" de que es cierto que ni la Policía ni la Guardia Civil tienen el citado 'software' espía y le ha recordado actuaciones irregulares de las de la conocida como policía patriótica.

El presidente ha insistido en que su Gobierno "no tiene nada que ocultar" sobre el asunto del espionaje y ha insistido en su "confianza" en el trabajo de las Fuerzas de Seguridad y los servicios de inteligencia.

Sánchez ha recalcado ante el portavoz del PNV que el Ministerio del Interior ya aclaró "hace semanas" que ni la Policía ni la Guardia Civil tienen 'Pegasus', pero Esteban le ha puntualizado que es "importante" que sea el presidente quien lo diga.

 

Veremos de aquí a unos meses

"Tomo nota y ya veremos de aquí a unos meses qué es lo que pasa, en cualquier caso asegúrese bien", le ha pedido hasta por dos veces, recordándole que ese es un programa "muy invasivo" y que el Gobierno debe "tener cuidado" porque hay "precedentes".

En este punto, ha mencionado el caso del ex jefe de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil Manuel Sánchez Corbí -cesado por el ministro Fernando Grande-Marlaska en 2018, después de que avisara a sus subordinados de que había que frenar las operaciones con cargos a los fondos reservados- o el del teniente coronel Daniel Baena, quien atacaba a políticos desde su cuenta de Twitter con el alias de 'Tácito'.

Esteban ha recordado también las actuaciones de la 'policía patriótica' y ha aludido a las "conversaciones" que entre el excomisario José Manuel Villarejo y responsables políticas como las 'populares' María Dolores de Cospedal o Esperanza Aguirre, que se están conociendo estos días.

 

Reformar la ley de Secretos

"Asegúrese bien por el bien de su Gobierno y de la democracia y, en caso de descubrir algo, ya que hacen gala de transparencia en este asunto, comuníquenlo", ha emplazado al presidente, instándole también a reformar "de una vez" la ley de Secretos Oficiales y a apoyar la tramitación de la reforma de la que regula el CNI que va a plantear su formación.

El jefe del Ejecutivo ha agradecido a Esteban el "tono" de su intervención y ha aprovechado para mostrar su "empatía" con todas las personas que han sido víctimas de "escuchas telefónicas sin permisos judiciales". "Desde luego que como presidente me preocupo de que (esto) pueda suceder", ha apuntado.

Además, ha garantizado que el Gobierno será transparente y colaborará con la Justicia porque "no tiene nada que esconder" y se ha comprometido a cumplir reformando la Ley de Secretos Oficiales, así como a "escuchar las propuestas que sean necesarias" para "mejorar" el trabajo del CNI, como la anunciada por los nacionalistas vascos.

 

No hay "mangantes" en el Gobierno

En concreto, el PNV aboga por cambiar la ley del CNI para vincular a su director con el presidente del Gobierno y así dejar claro quién es el responsable político, y para reforzar el control judicial de las actividades de los servicios de espionaje.

"Le garantizo que cuando hablo del compromiso con la regeneración democrática no me refiero sólo a que los mangantes no estén en el Gobierno, sino a que no se usen las instituciones públicas para obstaculizar la acción de la Justicia o para perseguir adversarios políticos de manera ilegal", ha zanjado Sánchez.

 

Sánchez llama "piolines" a los policías del 1-O

Sindicatos policiales y asociaciones de guardias civiles han reprochado este miércoles la alusión del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a los "piolines" para comparar el dispositivo policial del Ejecutivo del PP para frenar el referéndum del 1-O de 2017 con otros operativos policiales recientes en Cataluña.

"La diferencia en materia territorial cuando ustedes gobiernan y cuando gobierna el PSOE es que ustedes mandaban "piolines" a Cataluña y con nosotros, la Selección española de fútbol puede jugar en Cataluña sin ningún tipo de problema ni polémica", han sido las palabras de Sánchez en su réplica a la portavoz del PP, Cuca Gamarra, en la sesión de control en el Congreso.

Una alusión a los agentes censurada en el Congreso por varios diputados de PP y Ciudadanos y a los que se han sumado las principales organizaciones de las fuerzas de seguridad, el sindicato policial JUPOL y la asociación de guaridas civiles AUGC.

Para el secretario general de JUPOL, Aarón Rivero "es inconcebible e inadmisible la falta de respeto continuada que se muestra desde este Gobierno hacia las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, y en concreto hacia la Policía Nacional".

A juicio de JUPOL "es una vergüenza" que el presidente del Gobierno califique de "piolines" a los agentes que fueron desplazados en 2017 a Cataluña para defender el Estado de Derecho.

Desde la AUGC han exigido que Sánchez aclare si con esta alusión se refería al barco donde fueron alojados cientos de agentes o a los propios efectivos.

"Las declaraciones son muy desafortunadas", ha señalado el portavoz de la asociación, Pedro Carmona, pues supone dirigirse de forma despectiva a las fuerzas de seguridad que son quienes protegen el libre ejercicio de los derechos y libertades y garantizan la seguridad ciudadana.

En el transcurso de la sesión de control, la diputada del PP Ana Vázquez también se ha referido a la polémica al preguntar al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, quien ha aclarado que el significado de las palabras de Sánchez tenían la única intención de destacar las condiciones "indignas" con las el Ejecutivo del PP llevó a cientos de agentes a Cataluña.