Cuando se cumple el 90º aniversario del descubrimiento de la tumba del joven faraón Tutankhamon por parte del arqueólogo británico Howard Carter, El Día de Soria habla con el egiptólogo soriano Miguel Ángel López sobre lo que supuso este hallazgo. «Sin duda, fue el mayor descubrimiento para la Egiptología, aunque quizás por detrás [en relevancia] del hallazgo de la piedra Rosetta en 1799, que llevó a poder descifrar la escritura jeroglífica», subraya apuntando que «en cualquier caso, fue el hallazgo por excelencia de una tumba real sin saquear». Igualmente, destaca la riqueza de los ajuares «sin precedentes» -a pesar de que era un «rey niño» que probablemente fue enterrado en una tumba construida con prisas por lo inesperado del fallecimiento- daba una idea del poder desarrollado en la XVIII dinastía.
La repercusión fue y sigue siendo enorme, reconoce López Marcos, ya que «ha desatado la 'egiptomanía' a nivel mundial, que se ha convertido en el principal motor de crecimiento en ese país y, a la vez, ha alimentado el sueño de que, como se ha demostrado que las tumbas intactas existen, puede haber más». El experto sostiene que hay tumbas reales aún por descubrir, como la de Amenhotep I, Ramsés VIII o el fundador de la dinastía XVIII, el faraón Ahmose I. Como arqueólogo, no es partidario de destacar un descubrimiento sobre otro, pero para él hay algunos que sobresalen: la tumba de los guerreros de Xian que custodiaban la tumba del primer emperador de China, el descubrimiento de Pompeya en 1748 o el del Machu Picchu en 1911.
Y, sobre el gran Museo Egipcio que está a punto de abrir sus puertas, reconoce que «es otro atractivo más de un país entregado totalmente a la cultura y al turismo, donde ni se sabe ni se comprende lo que significa la 'turismofobia', como en otros lugares». En Egipto, avanza, «están orgullosos de su pasado y así lo exhiben y lo comparten». Además, hace hincapié en que este país se realizan más de 250 intervenciones al año, lo que hace que el material arqueológico crezca de forma exponencial y que «dentro de poco el gran Museo quede pequeño de nuevo, como el anterior». «Hay una gran cantidad de almacenes que albergan un sinfín de piezas de incalculable valor que nunca serán expuestas porque no hay posibilidad física de que así sea», reitera en su explicación.
texto filosófico. Sobre otro acontecimiento actual relacionado con la arqueología, el descubrimiento del papiro del rollo del Museo Egipcio de Berlín considerado el primer texto filosófico de la humanidad por parte de la egiptóloga española Marina Escolano Póveda en el Museo Bíblico de Mallorca, el soriano destaca su importancia «por varias razones». En primer lugar por su «dificultad», porque los fragmentos eran mínimos y asociarlos al texto del museo de Berlín no es nada fácil. En segundo lugar por su antigüedad y en tercero por su temática, ya que «es la primera vez que se asocia a algo filosófico, si es que se puede considerar así la conexión entre la persona y su espíritu o como enfrentarse a la enfermedad». En Egipto, próximamente el soriano participará en el inicio de la campaña en el Proyecto de la necrópolis Tebana, además de la estatua colosal del templo de Karnak. Esto se desarrollará en la campaña de primavera de 2023. En estos meses de trabajo en España, el arqueólogo soriano trabaja en varios proyectos en marcha entra Galicia y Madrid: la reconstrucción de la puerta Norte del Castro de Santa Tecla, la excavación de la fortaleza musulmana de Alcalá la Vieja o el traslado de la estatua ecuestre de Carlos III de 90 toneladas en la Puerta del Sol.