La vida en pandemia se normaliza y uno de los registros que ha permitido avanzar y levantar restricciones es el descenso de la mortalidad. Por primera vez desde que estalló el coronavirus, el incremento del contagio no tiene un efecto directo en los fallecimientos. 

La sexta ola, caracterizada por la explosión de ómicron, disparó en diciembre la transmisión del virus y desde entonces el contagio está disparado. En apenas cinco meses se han diagnosticados tantos casos de covid-19 como en los 20 meses previos de pandemia. Sin embargo, en esta ocasión la mortalidad apenas ha anotado cambios respecto de un año normal y, de hecho, el número de muertes en lo que llevamos de 2022 está en los mismos datos que en prepandemia. Así lo deja en evidencia la 'Estimación del número de defunciones semanales durante el brote de covid-19' que realiza periódicamente el INE. Hasta la semana 13 de este 2022 (del 28 de marzo al 3 de abril) han fallecido en Soria 328 personas, lo que supone igualar prácticamente los datos de 2019 en el mismo periodo (326) y está incluso por debajo de las cifras de 2018 (344). 

La cifra de este año, aún en pandemia, está muy por debajo de los datos de olas pasadas. Hasta la semana 13 de 2020, en plena primera onda epidemiológica, fallecieron 423 personas en Soria. Y en 2021, con la vacunación ya iniciada pero con el contagio disparado tras la resaca de la Navidad, el dato fue de 388, es decir, 60 personas más que este año.