La plantilla médica del hospital Santa Bárbara está compuesta por 186 profesionales y el «horizonte» es llegar a los 200. Un objetivo factible que puede cumplirse con la consolidación de facultativos eventuales. En estos momentos trabajan veinte en esta situación, la mayoría para cubrir nuevos proyectos o servicios, por lo que la previsión a corto plazo es la estabilización de, al menos, una quincena. «Con las nuevas leyes de contratación, antes de tres años se tendrán que incorporar [...] Queremos que la mayoría de los veinte formen parte de la plantilla, que los 186 se incrementen a 200. Un hospital como el de Soria estaría muy bien dotado de esta forma», puntualiza el director de Gestión de Profesionales de la Gerencia de Asistencia Sanitaria de Soria (Gasso), Luis Lázaro.

De esta forma, los eventuales fuera de plantilla que actualmente prestan servicio en el Complejo Asistencial de Soria están en Alergología (uno); Análisis Clínicos (uno); Digestivo (uno); Bioquímica Clínica (uno); Cardiología (uno); Cirugía General y Aparato Digestivo (uno); Cirugía Ortopédica y Traumatología (uno); Endocrinología y Nutrición (dos); Medicina Física y Rehabilitación (uno); Medicina Intensiva (uno); Microbiología y Parasitología (dos); Nefrología (uno); Neumología (dos); Neurología (uno); Oncología (uno); Reumatología (uno); y Urgencias (dos). 

«No es como el covid, que era por un tiempo. Por ejemplo, en Cardiología si ahora tenemos rehabilitación cardíaca pues ese profesional eventual se tiene que quedar; o en Neumología con los estudios del sueño; y en Urgencias espero que la plantilla pase de trece a quince», abunda el director de Gestión.

Sin embargo, el punto débil de este escenario optimista se halla en tres especialidades: Otorrinolaringología, Traumatología y Radiodiagnóstico. «Son deficitarias y generan un problema de asistencia. Es lo que más nos preocupa y ocupa. Estamos buscando por países de todo el mundo. Con las OPE que finalizarán en unos meses existe la esperanza de que se cubran las vacantes», advierte Lázaro.

Así las cosas, en Traumatología y Cirugía Ortopédica la plantilla es de diez médicos y hay tres vacantes; en Radiodiagnóstico, son once y faltan cuatro; y en Otorrinolaringología, son cinco plazas y hay dos puestos libres. Estos tres servicios suman nueve de las once vacantes de especialistas del hospital (hay una en Psiquiatría y otra en Urología). 

En cuanto a la OPE (Oferta Pública de Empleo) de Castilla y León, apostilla Luis Lázaro, que se está resolviendo en estas semanas afecta a 41 especialidades; a 24 en Soria. «Algunos ya están tomando posesión desde la semana pasada y continuarán en octubre y en noviembre. Esto supone, por una parte, la estabilización de profesionales que vienen prestando aquí servicio y reducir la tasa de interinidad del 27% actual al 15-18%», sostiene el responsable sanitario. Y, por otra parte, una vez que concluya la OPE y termine la fase posesoria, desde finales de octubre se puede recurrir al procedimiento denominando adjudicación complementaria, es decir, aquellos profesionales que aprobaron el examen y no consiguieron plaza pueden acceder a las vacantes libres. «Por eso tengo esperanza en que las tres especialidades difíciles se cubran. En Radiodiagnóstico se convocaron seis y han aprobado tres; en Traumatología, de cinco plazas, se adjudican dos de aquí, y quedan tres; y en Otorrino, de tres, se ha adjudicado una», resume.

Igualmente, señala algunos ejemplos en los que la adjudicación de las plazas en las correspondientes OPE ha sido total como en Urgencias Hospitalarias, con cuatro puestos estabilizados, o en Urología, con una plaza convocada y consolidada.

atención primaria. La plantilla de facultativos de Atención Primaria está formada por 167 médicos de Familia en total, aunque hay «ausentes por distintos motivos» (bajas, liberaciones sindicales, etcétera). También existen vacantes en centros de salud como los de Arcos de Jalón, Gómara y Soria Rural, mientras en el caso de los ambulatorios urbanos, Soria Norte y Soria Sur, «está todo cubierto».

En este caso, por un lado, existe necesidad de médicos de área, es decir, aquellos profesionales que hacen guardias. «La edad media en Primaria es alta y a partir de los 55 años tienen derecho a la exención de guardia. Al final, son muchos Puntos de Atención Continuada, mañana, tarde y noche, fines de semana y festivos, todo el año. Así que esa es la conclusión, fundamentalmente, faltan para guardias», sostiene Luis Lázaro.

También hace hincapié en las previsión de jubilaciones: en 2025 cumplen 65 años el 37,28% de los galenos de Primaria; y en 2027, el 45,56%. Es una estimación, ya que algunos pueden cesar su actividad laboral a los 63 años, mientras que otros la prorrogan hasta los 70 años. En el hospital, la previsión de jubilaciones a 2025 es del 14%, donde la media de edad de los médicos en la actualidad está «por debajo de los 40 años».

«Para arreglar esto una solución pasa por los MIR», destaca el director de Gestión de Profesionales. Cada año se convocan 15 plazas para médicos de familia, por lo que el reto está en «hacer atractiva la formación» y que se complete el cupo ofertado.

Y «otra vía de solución» es la homologación de títulos con otros países. «Ahora estamos buscando mucho en Sudamérica, pero para trabajar en el Sistema Nacional de Salud hay que tener un título de especialista. Tenemos profesionales que están pendientes. Como mínimo tardan 18 meses y con algunos países, tres años. Y con otro, como Venezuela o Cuba, es muy difícil», señala el director de Gestión. De forma puntual, en pandemia se permitió contratar a médicos no especialistas.

No obstante, Lázaro concluye que «el futuro está en los MIR». En estos momentos son 55: en Medicina Familiar y Comunitaria hay 34 residentes; tres en Medicina del Trabajo; uno en Psiquiatría; dos en Psicología; cuatro en Urología; cuatro en Medicina Intensiva; y siete en Medicina Interna. Además, se forman 24 EIR (Enfermeros Internos Residentes) en Primaria y dos en Salud Mental.