La resaca de la Semana Santa  y el fin del uso obligatorio de las mascarillas tienen ya su efecto en la onda epidemiológica. La sexta ola, lejos de remitir, anota otro repunte. Todos los indicadores han empeorado y, según reconoce el gerente de Asistencia Sanitaria en Soria, Enrique Delgado,  «hay otra vez una escalada de casos». Si bien «la mayoría son leves o asintomáticos y muchos no presentan clínica», este nuevo pico está afectando otra vez «a las personas de edad muy avanzada con pluripatologías complejas», lo que está provocando que «suban los ingresos». La semana comenzaba con 18 pacientes hospitalizados con covid, el doble de los que había a principios de mes. Al cierre de esta edición permanecían quince personas en  la sexta planta del Santa Bárbara con el virus, nadie en UCI.  

«La situación es muy preocupante porque hay muchos contagios y la tendencia es creciente», resume el responsable sanitario, dejando así en evidencia que de nuevo hay una calma tensa en el hospital. Porque, aunque «la mayoría de los casos evolucionan favorablemente», «hay pacientes que fallecen», lamenta. Pero, también, porque el hecho de que la hospitalización covid siga subiendo puede acarrear una nueva escalada, y eso podría tener consecuencias drásticas. «Mientras sigamos con 15-20 pacientes y una planta covid se puede mantener la actividad ordinaria, y ahora además se está trabajando a pleno rendimiento para tratar de reducir las listas de espera; pero obviamente nos preocupa lo que pueda ocurrir», admite el gerente, quien insiste no obstante en que, de momento, el incremento de casos «no ha afectado a la actividad» y se sigue trabajando a destajo. Y eso, matiza, que a nivel de plantilla la sexta ola sigue acarreando bajas laborales. En concreto, en lo que va de mes se han contagiado 60 profesionales sanitarios en Soria y, como recuerda Delgado, «aunque con la nueva estrategia ya no son obligatorias las cuarentenas con carácter general, en el sistema sanitario sí lo son», por lo que los profesionales que se contagian cursan baja. «No son tantos como en otros momentos, pero se nota», admite.

Los datos de contagio se han disparado en los últimos días de nuevo y vuelven a rondar el centenar de casos diarios, lo que supone regresar a datos de enero y febrero. Son cifras «altas» teniendo en cuenta que esta ola «dura ya más de cuatro meses», que más de 30.000 sorianos se han contagiado en estos dos años de pandemia y que prácticamente el 90% de los sorianos están vacunados.«No pensé que esta ola durara tanto y con tanto contagio, cuando había tanta gente vacunada»,  admite Delgado. A su juicio, responde a «la capacidad de mutación del virus», que está provocando que se transmita de nuevo y que «gente que ya superó la enfermedad incluso en esta ola, se reinfecte de nuevo». La extremadamente transmisible variante ómicron que explotó en diciembre y provocó un contagio sin control [esta sexta ola suma ya tantos casos como las cinco anteriores juntas] está siendo remplazada por una subvariante, la BA.2, también conocida como «ómicron silenciosa» y eso está haciendo que «nos volvamos a contagiar», sentencia el gerente, quien pide «prudencia» y, sobre todo, proteger a los vulnerables.