"Los jóvenes vuelven a interesarse por el campo"

P. Velasco
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Desembarcó el pasado mes de abril en la Consejería con una amplia trayectoria como ingeniero agrónomo. Ahora afronta una nueva PAC, que entrará en vigor el próximo 1 de enero, y su adaptación a las peculiaridades de nuestra comunidad

"Los jóvenes vuelven a interesarse por el campo"

Las OPA avanzan un descenso de la superficie de cereal para la próxima campaña por los elevados costes de producción. ¿Temen una bajada de la producción agrícola después de cerrar una «mala» campaña?

Es verdad que la campaña no ha sido buena. Hemos terminado en torno a 5,3 millones de toneladas, lo cual supone una merma respecto a las previsiones iniciales. El clima inicial de sequía dificultó la siembra de la superficie de colza, y hoy es justo al contrario, el exceso de pluviometría está limitando las siembras. Es cierto que queda la primavera, donde todavía se puede sembrar cereal, por lo que no sabremos la superficie definitiva hasta marzo. Además no solo afectan los costes energéticos, también la incertidumbre por el desarrollo de este Plan Estratégico de la PAC tan curioso y medioambientalista que el sector no ha llegado a entender y que ahora se les está explicando para que como mínimo estén en un ecosistema. Todavía no sabemos qué va a ocurrir, aunque hay previsión de bajada de costes energéticos y del fertilizante, lo que puede ayudar a que se animen a sembrar, a lo que se puede sumar un repunte del precio del cereal.

Castilla y León publicó recientemente sus flexibilizaciones para la PAC de 2023. ¿Se podrá cumplir el objetivo de que todo agricultor cumpla al menos un ecorrégimen?

Intentaremos que sí, porque con las condiciones de flexibilización es más fácil esa disminución de la rotación o ese incremento del barbecho. Hay determinadas medidas que van a favorecer que los agricultores se acojan a un ecoesquema y creo que los ganaderos, con esa reducción de 120 a 90 días a nivel de pasto, también tendrán esa opción. Estamos a tiempo y es positivo que no haya pérdida de fondos. También es cierto que intentaremos, a lo largo de 2023, ir modificando parte de los criterios de ese Plan Estratégico para que en 2024 tengamos algunas normas un poco más coherentes, menos medioambientalistas y pensando en esa seguridad alimentaria que tenemos que garantizar a nuestros consumidores a nivel europeo.

¿Qué hubiera cambiado de la PAC que entra en vigor el 1 de enero si hubiera podido negociarla?

Una PAC bastante diferente. Todos tenemos claro que hay que ir optimizando los recursos para ser más sostenibles, pero hay que hacerlo equilibrando esa merma de aplicación de fertilizantes, esa disminución de fitosanitarios… Hay muchas de esas trabas burocráticas que había que haber intentado en algún caso eliminarlas y en otros trasladarlas en el tiempo. La PAC tenía que haber marcado unos retos de futuro, pero con un tiempo límite. Todos esos retos o hitos ver si son factibles de realizar. Y luego hay determinados requerimientos que había que haber analizado más en profundidad. Porque por ejemplo, León es mucho más sostenible haciendo monocultivo de maíz que haciendo determinadas rotaciones. Lógicamente no todo tiene que ser el mismo modelo.

Castilla y León es una de las comunidad que antes abona las ayudas de la PAC. ¿Se va a mantener ese compromiso de pago anticipado?

El compromiso que hemos tenido es llegar al 95% del anticipo, que es lo máximo que nos permite la UE, y estos días está llegando ya la ayuda agroambiental de 2021 y estamos rematando los últimos pagos para cumplir con el 95%. Hemos sido la comunidad que en el mes de octubre antes anticipamos y ahora estamos igual para cumplir con el compromiso antes de que acabe el año.

Se acaban de aprobar los presupuestos de la Junta para 2023. ¿Qué destacaría de su cartera y qué aportaciones hay respecto a los presupuestos de su antecesor?

Es un presupuesto inversor, realmente lo que nos importa es que los capítulos 4, 6 y 7 crecen un 14,2%. Dentro de esas partidas hay algunas que destacan como la línea de seguros, con un aumento del 20%; todas las de sanidad animal para que Castilla y León sea declarado indemne en todas las provincias; partidas importantes para cebaderos; la protección de la fauna salvaje con 3,5 millones para intervenciones en explotaciones; un incremento en la primera instalación, donde se va a empezar a tutorizar a los jóvenes; vamos a llegar a las 93.000 hectáreas de concentraciones parcelarias; y por primera vez se va a intentar mejorar la eficiencia de las comunidades de aguas subterráneas. Hemos sido capaces de atraer 31,6 millones de euros de los fondos Next Generation vinculados a la agricultura de precisión, a la tecnología 4.0, a eficiencia energética y tratamiento de purines, lo que nos va a permitir a lo largo de 2023 poder cubrir el 100% de las solicitudes que se han ido presentando en 2022 y volver a convocar en 2023 otra línea.

Desde 2014 se han perdido la mitad de explotaciones del sector del vacuno de leche, una situación que se repite en el caso del ovino de leche. ¿Se van a adoptar medidas para detener la sangría que sufren?

Son dos sectores que a lo largo del último semestre del año han tenido un comportamiento bastante positivo que les está permitiendo compensar parcialmente todo lo que venían arrastrando de antes. El desarrollo y el cumplimiento de la Ley de la Cadena Alimentaria está haciendo que la leche de vacuno ya esté en los lineales en torno a un euro y eso le permita cobrar más al ganadero. Ahora se negocia la leche de ovino para el primer trimestre del año que viene y se está hablando de precios positivos. Si cumplimos la Ley de la Cadena, son sectores que van a tener esa capacidad de seguir.

Es más preocupante la situación del ovino de carne, que empezará a tener problemas después de Navidad. Es un sector que necesita una ayuda específica y a lo largo del 2023 buscaremos una posición con el Ministerio, y a ver si el 1 de enero de 2024 podemos tener algo en funcionamiento que permita seguir al sector.

¿Qué medidas efectivas se van a poner en marcha para conseguir que se cumpla la Ley de la Cadena Alimentaria?

Es cierto que hay diferencia de velocidad entre la legislación nacional y la nuestra. Nosotros hemos empezado a mantener varias reuniones para establecer el Observatorio de la Cadena y en enero lanzaremos las primeras reuniones para que todo el sector en conjunto conozca las ventajas de la mediación y del arbitraje. Además, estamos potenciando el papel del Defensor de la Cadena. Este año también se empezó a hacer el primer estudio de costes para todas las denominaciones de vino y eso se extenderá al resto de sectores. También se va a lanzar una herramienta piloto de estudios de costes para que cualquier agricultor o ganadero tenga la capacidad aproximada de conocer sus propios costes de producción.

Uno de los objetivos que se marcó cuando tomó posesión de su cargo fue la regeneración de las explotaciones. ¿Cómo se va a conseguir atraer al campo a esos 650 jóvenes al año que quiere incorporar?

Estamos rematando los expedientes y este primer año vamos a cerrar con 683 jóvenes para incorporarse a lo largo de 2023. Parece que hay un relanzamiento por el interés de los jóvenes, curiosamente más en la ganadería que en la agricultura, lo cual nos alegra mucho con respecto a lo que venía siendo habitual en periodos anteriores. Vamos a intentar que no haya ninguna incorporación fallida y vamos a tutorizar a ese joven agricultor los primeros años, tutorización que se complementará con actividades y otras líneas para meter un concepto de familia, con lo que creo que seremos más eficientes.

Quiere que las OPA pasen a convertirse en entidades colaboradoras. ¿Qué implicará este cambio? ¿Habrá un descenso de las partidas o ayudas?

Eso viene regulado en la Ley Agraria de 2014 y estamos a 2023 y todavía nadie se ha atrevido a que las organizaciones sean entidades colaboradoras de la administración. De esta forma se reconoce el papel que ejercen con la propia administración, porque son las que nos ayudan a asesorar, hacen los planes de mejora, las primeras instalaciones… Y además, les va a dar una garantía jurídica que hoy en día no tienen. También quiero intentar que la sociedad vea que el apoyo público se da por ejercer ese tipo de colaboración. Las organizaciones criticaban al principio que se les iban a quitar subvenciones directas, pero yo voy a intentar que reciban más apoyo público. En definitiva, ni va a haber recortes ni se las va a menospreciar.

Las últimas lluvias parece que han alejado la preocupación por la sequía. ¿Cuáles son sus propuestas para paliar esta situación?

Es cierto que ha llovido, pero si estamos ya desembalsando en diciembre, eso quiere decir que la política hidráulica es muy mala. Necesitamos aumentar nuestra capacidad, porque los cambios que se están produciendo en la pluviometría nos obligan a regular más y somos una de las comunidades con menor regulación. Es importante regular, recrecer y hacer medianas construcciones para optimizar ese consumo de agua. También es cierto que hay que seguir invirtiendo en el mantenimiento de las infraestructuras y trabajando en la modernización de los regadíos.