Uno de cada tres jóvenes se emborracha de forma frecuente

SPC
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La Comunidad es el cuarto territorio con mayor prevalencia de consumo entre jóvenes y el 80% reconoce haber bebido

Imagen de un grupo de jóvenes durante un botellón. - Foto: Pablo Lorente

El consumo de alcohol entre los estudiantes sigue al alza y las distintas campañas de sensibilización y ocio alternativa que se han lanzado siguen sin apartar a los más jóvenes de los botellones. Una costumbre que corre el riesgo de convertirse en tradición a la hora de que los menores se inicien en el consumo de bebidas alcohólicas, toda vez que ocho de cada diez estudiantes de enseñanzas secundarias de entre 14 y 18 años, bebió alcohol en el último año en la Comunidad. Así lo revela la primera edición de la 'monografía de alcohol del Observatorio Español de las Drogas y las Adicciones', elaborada por la Delegación del Gobierno para el Plan Nacional de Drogas y recogido por la Agencia Ical, cuyos resultados ponen de manifiesto que tres de cada diez reconoce que tiene episodios de consumo «intensivo», es decir, que se emborracha de forma frecuente. Además, más de la mitad de los jóvenes castellanos y leoneses reconoció haber hecho un botellón en el último año. En concreto, el 51,7 por ciento de los que participaron en el estudio, que supone 1,1 puntos que en España.  

Una problemática que sigue enquistándose con el tiempo y alcanza ya una prevalencia de consumo de bebidas alcohólicas  en este colectivo del 80 por ciento en los últimos doce meses, cuatro puntos más que la media nacional, que se situó en el 75,9 por ciento. Esto supone que el ocho de cada diez bebió alcohol, a pesar de tenerlo legalmente prohibido para bebidas de alta graduación, durante el último año. De hecho, Castilla y León es el cuarto territorio de España –junto a Aragón– con mayor prevalencia de consumo de alcohol entre los jóvenes, solo por detrás de Navarra (82,5 por ciento), La Rioja (81 por ciento) y País Vasco (80,2 por ciento).

La Comunidad también se situó a la cabeza en la prevalencia del consumo entre los que respondió haber bebido alcohol alguna vez en la vida. En concreto, en cuarto lugar, después de que el 81,9 por ciento haya bebido alcohol, cuatro puntos más que la media nacional. Ocurre lo mismo con lo que contestaron haber ingerido bebidas de alcohol en los últimos 30 días (61,9 por ciento, frente al 58,5 por ciento de España).  

La Encuesta sobre Uso de Drogas en Enseñanzas Secundarias en España (Estudes) destacó que cada vez hay más jóvenes que reconocen episodios de consumo intensivo (también conocido como 'binge drinking'), que en el caso de Castilla y León es del 33,5 por ciento frente al 32,3 por ciento nacional. En este ránking, la Comunidad solo está detrás de Navarra, La Rioja y Aragón. Por el contrario, Galicia (23,7 por ciento) y Canarias (27,3 por ciento) son las autonomías donde esta práctica está menos extendida.

El Ministerio de Sanidad aseguró que el alcohol supone en España un «importante» factor de riesgo de carga de enfermedad y mortalidad. De hecho, recordó que es la sustancia psicoactiva más consumida por la población general en todas las edades. En todo caso, destacó que el problema es «especialmente preocupante» entre las personas jóvenes y menores, que además son más vulnerables a sus efectos.

Bringe drinking

La encuesta apreció, a  nivel nacional, un repunte de intoxicaciones etílicas agudas y 'binge drinking' en todos los tramos de edad y en ambos sexos. En el grupo de menores de edad (14 a 17 años), un 47,1% de los chicos y un 52,3% de las chicas dice que se ha emborrachado alguna vez. En concreto, en el grupo de 15 y 16 años, la prevalencia en los últimos 30 días fue del 17 por ciento, cuatro puntos más que la media europea. El informe añadió que este consumo intensivo se asocia en muchas ocasiones, además de a los efectos directos del alcohol sobre la propia fisiología y desarrollo neurológico, a determinadas conductas de riesgo. Por ejemplo, el 2,7 por ciento de los estudiantes reconoció haber conducido un vehículo bajo los efectos del alcohol en el último año, y el 17,2 por ciento dijo haber viajado como pasajero en un vehículo conducido por alguien que estaba bajo los efectos del alcohol (el 20,5 por ciento de las chicas y el 17,2 por ciento de los chicos). Además, el 16,9 por ciento dice haberse visto implicado en una pelea o agresión.

El 95% de los menores no tuvo dificultades para comprar alcohol

La monografía elaborada por la Delegación del Gobierno también pone en evidencia como la compra de alcohol entre los más jóvenes sigue siendo habitual pese a las restricciones legales que prohiben su venta hasta los 18 años. Sin embargo, el 94,9 por ciento de los estudiantes de 14 a 18 años reconoció no haber tenido ninguna dificultad para conseguir bebidas alcohólicas. Además, el 37,7 por ciento de los encuestados menores de edad asegura que accedió directamente al alcohol, por ellos mismos (29,2  por ciento) o a través de otros menores (8,5 por ciento). Por otra parte, en la población general de 15 a 64 años el consumo es también elevado. El 95,8% de los castellanos y leoneses (casi tres puntos más que la media nacional) consumió alcohol alguna vez en su vida. Es el segundo porcentaje más alto del país, solo por detrás de Asturias (96,2%) y a la par que en la Comunidad Valenciana. El porcentaje bajó al 80,1% durante el último año y al 68,2% durante el último mes. En el conjunto de España, un 8,8% de los ciudadanos declaró consumir a diario. En este sentido, el Ministerio apreció una «consolidación» del cambio en el patrón de consumo, alejándose del consumo diario tradicional. Los episodios de consumo intensivo son frecuentes, ya que afecta a uno de cada cuatro castellanos y leoneses en el último mes (el 19,6 por ciento frente al 15,4 por ciento nacional.