"La puerta del despacho de Personal siempre está abierta"

Ana I. Pérez Marina
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El Ayuntamiento de Soria encara una Oferta de Empleo Público (OEP), con la que se espera generar «entre 20 y 25» plazas, buena parte para la Policía Local. Además comenzará la revisión y actualización de la Relación de Puestos de Trabajo (RPT)

"La puerta del despacho de Personal siempre está abierta" - Foto: Eugenio Gutierrez Martinez.

En las últimas semanas los asuntos del área de Personal del Ayuntamiento de Soria ocupan los titulares. Tanto la Junta de Personal funcionario como el Comité de Empresa recientemente elegido por el personal laboral cuestionan la política del departamento dirigido por la concejala Teresa Valdenebro y también la oposición se suma, de una u otra forma, a las críticas. Las vacantes de la Policía Local, la plaza de intendente, los bomberos, los socorristas... se apura el final de la legislatura para arañar concesiones, al mismo tiempo que el equipo de Gobierno aprovecha este último tramo del mandato para sacar adelante una Oferta de Empleo Público (OEP) e «iniciar» una nueva RPT. Valdenebro asegura que las puertas de su despacho siempre están «abiertas» y avanza que se reunirá este mismo viernes con los representantes de los trabajadores municipales.

Tanto la Junta de Personal funcionario como el Comité de Empresa, también empleados de las instalaciones deportivas, están en pie de guerra. ¿Es tal la falta de entendimiento?

La falta de entendimiento no es tal y como se ha trasladado. Cada colectivo de trabajadores tiene sus características y siempre surgen pequeñas diferencias objeto de negociación, para eso estamos, abiertos al diálogo, para intentar encontrar un punto en el que coincidamos e intentar dar una solución a las pretensiones y a los planteamientos que hacen.

¿Pero cómo es la relación?

Siempre hay que partir de una cordialidad. Si tú llegas a una reunión con una tensión, difícilmente vas a llegar a un encuentro. Uno tiene que llegar con las cosas claras, con planteamientos para trasladarlos a la otra parte. Llegar a una reunión fruto de la crispación es negativo. Hay que partir de que hay que buscar una solución, de que hay que dejar las diferencias que pueda haber a un lado o tratar esas diferencias con educación, respecto y corrección propias que se debe mantener en las reuniones. 

Ahora mismo estamos manteniendo reuniones con los socorristas de las piscinas municipales porque es más complicado llegar a un acuerdo en un tema de cuadrantes con colectivos que dependen de diferentes turnos que con los empleados que dependen de una rutina que siempre es la misma. Cuando hablamos de socorristas, policías o bomberos que dependen de una rotación y de unos horarios que van cambiando, que trabajan en turnos, es más complicado. Hay que tratar de poner sobre la mesa unas premisas y después  llegar a un acuerdo.

¿Cuándo han sido las últimas reuniones con la Junta de Personal y con el Comité de Empresa?

Ha habido elecciones sindicales hace nada. El viernes [15 de febrero] están convocados la Junta Personal y el Comité de Empresa. La puerta del despacho de Personal siempre está abierta, tanto para la Junta de Personal como al Comité de Empresa como a cualquier trabajador a nivel particular. 

«Desde hace años el Ayuntamiento de Soria viene incumpliendo sistemáticamente el convenio colectivo para el personal laboral, en concreto en materia de contratación, calendarios laborales y modificación de los mismos, sin que exista negociación previa, tal y como establece el mismo». Textualmente lo decía la semana pasada el Comité de Empresa.

No estoy de acuerdo. El Ayuntamiento de Soria en materia de contratación ha llevado un política que no se ha llevado en otras administraciones. Este equipo de Gobierno ha tenido dos premisas básicas: mantenimiento del empleo y creación de empleo público. Mientras otras administraciones, como la Junta, han destruido en torno a 6.000 empleos, el Ayuntamiento lo ha mantenido y lo ha incrementado, por tanto, en política de empleo podemos estar orgullosos de que en este tiempo no se ha mandado a la calle a ningún trabajador, salvo los que entran por contrato que saben que tienen una fecha de inicio y una fecha de fin.

En cuanto a los horarios de los trabajadores no se han modificado en los últimos tiempos, cumplen la legalidad vigente. Hay un tema que es objeto de debate que son las vacaciones, pero no es cierto que no se puedan coger vacaciones cuando ellos quieren. Tú puedes pedir vacaciones cuando las quieres coger, pero si en un departamento todo el mundo las pide la misma semana, a alguien hay que decir que no, habrá un sorteo o lo que sea. En la medida de los posible siempre se trata de satisfacer las necesidades de los trabajadores, tratamos de buscar la conciliación de la vida laboral y familiar, se piden excedencias, reducciones de jornada... y se atienden todas.

¿Con qué plantilla cuenta actualmente el Ayuntamiento de Soria?

Ahora mismo son 397 nóminas. Ese número puede incrementarse en determinados momentos, en junio con los planes de empleo, con la formación dual... En 2007 eran unos 350 trabajadores. Ha habido momentos de pico máximo hasta 417. Y con empleo indirecto (oficinas de turismo, casa de acogida, agua, basuras...) tendremos otros 400.

¿Cuál es la tasa de temporalidad? Según la EPA, el 27,5% de los empleados públicos en Castilla y León tiene un contrato eventual. Lo representantes sindicales y los partidos de la oposición dicen que en el Ayuntamiento de Soria es del 40%.

Es complicado sacar la tasa de temporalidad, porque hay que descontar los trabajadores que van por subvención y considero que no hay que meterlos en el cómputo, son temporales porque la subvención marca el inicio y la finalización. La tasa puede ser elevada, pero no creo que llegue al 40%. Con la OEP (Oferta de Empleo Pública) en la que estamos trabajando y con la actualización de la RPT (Relación de Puestos de Trabajo) vamos a intentar que esa tasa sea menor. 

En cualquier caso, independientemente de la tasa, que no la vinculen ni al amiguismo, ni colegueo, ni a nada, porque la gente de la casa se siente afectada y es gente muy válida y muy capacitada. Están los cargos de confianza, como los auxiliares de todos los grupos políticos, que los ponen sus partidos por confianza, por amistad o por lo que sea.

Primero vamos a abordar la OEP. Va a ser una OEP amplia, sobre todo valorando qué puestos se van a mantener en el Ayuntamiento, porque sería absurdo sacar una oferta de empleo de puestos que luego vas a cambiar con la RPT. Así que oferta con aquellos puestos que tengamos claro que se van a mantener en el Ayuntamiento. Serán de turno libre y habrá que plantear un concurso de traslados, para que la gente pueda cambiar. Después, abordaremos una RPT a fondo, con tiempo, muy meditada, porque las circunstancias han cambiado. No es lo mismo la administración ahora que hace diez años.  Habrá departamentos que habrá que reforzar y reorganizar otros.

En cuanto a la OEP, la Junta de Personal dice que sacarla ahora es «electoralista». ¿Lo es? ¿Y en qué medida cree que también lo es la presión que ahora se está ejerciendo?

La OEP  hay que sacarla, si la ven electoralista, que la vean. Una OEP es positiva tanto para el personal que tenemos en la casa como gente de fuera que puede estar esperando si sale una plaza. Con las plazas de Policía Local ha habido unas jubilaciones y lógicamente hay que sacarlas ya. Vamos a intentar sacar el máximo de plazas posible.

¿Cuántas plazas se crearán?

Me gustaría que supere las veinte plazas. En aquellos departamentos que haya vacantes se van a intentar sacar, para llegar a las 20- 25 plazas de oferta de empleo, no todas libres porque hay que pensar también en el personal de la casa. La última OEP fue bomberos y policías locales hace dos años. Ahora mismo tenemos en boletín las plazas de bomberos conductores, la de sargento y la de jefe del parque, con lo cual estamos constantemente intentando dar cobertura a lo que ya teníamos generado, pero ahora hay que generar más. 

Se nos van a jubilar doce policías a lo largo de este año y hay que cubrirlas sí o sí. Y si se genera alguna plaza más, lógicamente, se sacará. Hay que analizar bien todos los departamentos en los que las vacantes estén cubiertas por interinos o provistas de otra manera, para que se cubran de manera definitiva. Primero esa OEP y después la RPT, que también habrá ampliación de plazas.

¿Qué se reforzará?

En la RPT tengo muy claro que el departamento informático hay que reforzarlo, cada vez estamos más metidos en una administración electrónica y hace falta más personal técnico.

¿En qué se ha incidido en esta legislatura?

Durante este tiempo se ha reforzado donde ha sido necesario: Participación Ciudadana, Atención al Público... El refuerzo no va solo en contratar personal, sino también en dotarles de medios para que ejerzan su trabajo en las mejores condiciones. En Bomberos, que también ha sido un tema muy debatido en toda la legislatura, se ha hecho una inversión en el parque de en torno a 400.000 euros (camión, cascos, arneses...) y esto va en beneficio de un mejor servicio del trabajador en mayor confort y repercute en los ciudadanos. No hace tanto hemos negociado el tema del retén, que era una caballo de batalla, y se llegó a un acuerdo. 

Hace poco han entrado diez policías, dos personas que venían de  otras administraciones y otros ocho que se han incorporado a esa plantilla que está ciertamente envejecida. Las jubilaciones se van a cubrir.

Cultura se ha reforzado muchísimo, Informática, Registro, Servicios Sociales... el Ayuntamiento va viendo las necesidades en cada momento. También se ha formado a todo el personal en administración electrónica.

En la Policía Municipal se prevén, como dice, doce jubilaciones, ¿por qué no se ha actuado antes?

Ha sido excepcional porque se ha aprobado un decreto hace cuatro días por el que los policías pueden jubilarse con 60 años, con unas determinadas circunstancias incluso con 59 años. Los policías tenían que presentar la solicitud antes del 31 de enero, independientemente de que se jubilen el 1 de febrero o el 31 de diciembre. Antes no se podía sacar esas plazas porque no estaban vacantes.

La Junta de Personal habla de «turbio proceso de selección» en la convocatoria para cubrir la plaza de intendente de la Policía Local. ¿Qué explicación tiene?

Por parte de la oposición se pidió una comisión extraordinaria y se dieron las explicaciones oportunas. Ha habido más polémica por todo lo que se ha levantado en torno a este proceso. Es una plaza de un grupo A1 con la responsabilidad de un intendente jefe de la Policía y, lógicamente, una plaza así tiene un nivel de exigencia diferente a otros. El nivel de conocimiento debe ser alto. Se inició el proceso, surgieron problemas, el secretario emitió un informe a cerca de la admisión-exclusión de un aspirante al proceso selectivo, se admitió, hay sentencia y se decidió que se admitía. El proceso siguió adelante, se hicieron las pruebas psicotécnicas y físicas, las pasaron casi todos. Al examen teórico llegan seis personas, de las que se presentan cuatro a leer el examen y suspenden. El tribunal entiende que no dan el nivel, no es que lo ponga más fácil o difícil. Tenían que exponer tres temas y ninguno aprueba. No es como en el cole y es que me han suspendido. 

El Ayuntamiento tiene que decidir qué hace porque es una plaza de una máxima responsabilidad, hay que darle cobertura y tenemos que plantear cómo, si convocándola de nuevo, que venga gente de fuera o cómo se hace.

¿No se decantan por alguna opción?

No, porque es un tema complicado. Si alguien quisiera venir lo valoraríamos y si se hace otra vez una oposición hay que entender que no es sencilla, es larga y lleva su tiempo.

¿Y mientras tanto?

El intendente que está en funciones  las seguirá prestando.

CSIF señalaba hace poco que el servicio de atención al público de la oficina de la Policía Local está a cargo de un auxiliar administrativo y que la competencia es del jefe de negociado, «apartado» por un expediente disciplinario «archivado sin cargos» en agosto. ¿Cuál es la situación?

Hay un jefe de negociado que está aquí en el Ayuntamiento y un auxiliar administrativo en la Policía. Ahora mismo se ha contratado a una persona más a través de una bolsa de empleo durante unos meses para que quite carga de trabajo. Había policías en segunda actividad que también estaban en esta oficina. El expediente disciplinario se archivó en agosto y, de momento, el jefe de negociado está aquí [en el Ayuntamiento] porque se ha decidido que siga prestando aquí funciones. Hay muchos ciudadanos que van al cuartel a pagar una multa, pero también lo pueden hacer aquí. Es una cuestión organizativa.

En 2016 se suspendió el segundo examen del proceso selectivo de auxiliar administrativo. No ha vuelto a convocarse. ¿Por qué?

Hay que retomarlo y volver a sacar esa bolsa de empleo. Hemos estado metidos en procedimientos de policías locales, bomberos... y son muy largos. En el departamento hemos estado un tiempo sin técnico de personal, se incorporó un interino este año y, lógicamente, se van sacando los temas con la celeridad que se puede. La policía y bomberos eran mucho más urgentes que retomar la bolsa de auxiliares administrativos.

¿Qué medidas se pueden adoptar para evitar que ocurra lo mismo?

Esto es Soria y todos nos conocemos. Cuando se presenta tanta gente, ¿quién no tiene un conocido entre los aspirantes? La gente que forma parte del tribunal tendrá que valorar si se queda fuera del proceso o nombrar a otra persona. Es muy diferente tener un conocido a tener una amistad manifiesta o un familiar. Un vínculo familiar es muy fácil demostrarlo, pero si se presenta un vecino, un amigo... ese grado de separación es complicado. Tendremos el máximo cuidado.

La Junta de Personal propone un vocal con voz y voto en los tribunales de selección. ¿Por qué no se incluye?

De los tribunales forman parte presidente, secretario y vocales. El secretario del tribunal tiene voz, pero no tiene voto, y el resto son miembros sin voz y sin voto. Se da la posibilidad de que asistamos políticos y Junta de Personal con voz y sin voto. Se ha establecido así y hay garantías suficientes para que sea un tribunal totalmente sin presión. Confío plenamente en los funcionarios y se nombran con toda la confianza.