Músculo para la medular

Christian Sánchez (SPC)
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Kessié, realizando malabares con el balón en la presentación con el Barcelona. - Foto: Enric Fontcuberta (EFE)

Franck Kessié aterriza en el Camp Nou con el beneplácito de Xavi Hernández a su contratación. Puede resultar extraño pensar que un idealista del juego de posición como el de Tarrasa demande un fichaje de un futbolista más potente físicamente que pulcro técnicamente, pero hasta su gran maestro, Pep Guardiola, contaba en sus grandes obras con 'currantes' como Seydou Keita o Yaya Touré. El técnico ya tiene a sus órdenes a un jugador con un rol diferente en el centro del campo.

El reto es mayúsculo, tanto para el entrenador como para el jugador. El marfileño afronta su primera aventura en Europa fuera de la Serie A. Destacó hasta 2015 en el Stella Club de Costa de Marfil y fue ojeado y contratado por el Atalanta para su equipo juvenil. El cuadro de Bérgamo lo cedió al Cesena en la temporada 2015/2016 y allí explotó definitivamente. Después, regresó a 'La Dea' en la 16/17 y, en el mercado invernal, el Milan llamó a su puerta para llevárselo a préstamo hasta el final de la campaña. Su rendimiento convenció en San Siro y, desde 2019, comenzó a vestir de 'rossonero'. 

En la entidad siete veces campeona de la Champions, el jugador africano alcanzó un valor máximo de mercado de 55 millones de euros en el mercado estival de 2021, según Transfermarkt. Actualmente, tras cumplir su contrato con el Milan y llegar libre al Barcelona, su precio está en los 45 millones. 

En Italia, su carrera no se ha separado de la zona medular del terreno de juego. Kessié es un centrocampista puro, en el más sentido literal de la palabra. Su polifuncionalidad es limitada cuando más se acerca a un costado a uno de los fondos del campo, sin embargo, en la zona ancha es el jefe. Ha jugado tanto de pivote defensivo como más cerca de la parcela atacante, casi como enganche, pero siempre ubicado en la sala de máquinas de su equipo. 

El marfileño se ha mantenido como titular indiscutible en el Milan en las últimas temporadas. El pasado año llegó a portar el brazalete de capitán en algunos encuentros incluso. Era toda una institución en la ciudad del norte de Italia. Con la camiseta 'rossonera' fue testigo de la recuperación del equipo a nivel nacional en los últimos cursos futbolísticos, donde regresó a Liga de Campeones y volvió a ser campeón de la Serie A la temporada pasada. Kessié contribuyó con seis goles en los 2.309 minutos que acumuló sobre el terreno de juego. 

'Overbooking'

El de Ouragahio se incorpora a una entidad catalana que, a falta de confirmar algunas salidas, muestra un claro 'overbooking' en el centro. Sergio Busquets, Pedri, Gavi, Nico y Sergi Roberto parecen fijos para Xavi Hernández a la hora de continuar formando parte de la plantilla del primer equipo de cara a la próxima campaña. Son casi prioritarias las salidas de Miralem Pjanic y Riqui Puig y el futuro de Frenkie de Jong continúa siendo muy incierto. En ese tumulto de futbolistas asoma la cabeza un Kessié que, en principio, no parte como titular, pero que puede ser muy útil para algunos encuentros y situaciones de partido.

El entrenador azulgrana deberá dar forma al juego del interior africano para adaptarlo a su ideario de juego. La potencia que siempre ha mostrado el futbolista puede entrar en un nuevo paradigma si consigue introducir en su paleta de recursos algo más de pausa con el balón y visión de juego. 

Su experiencia con tan solo 25 años es un aval que el Barça deberá cuidar para moldear un centrocampista que parece desmarcarse de la esencia del fútbol culé, pero que es siempre necesario para culminar cualquier obra.