"Un reto por delante es la digitalización"

A.P.L.
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Cohesión entre la parte pública (ayuntamientos) y la privada (empresas y asociaciones) y saber trabajar para poner en común las necesidades de un territorio muy heterogéneo y reconocer todos los proyectos de innovación es lo que define a este grupo

"Un reto por delante es la digitalización" - Foto: Eugenio Gutierrez Martinez

Tras siete años como presidenta del grupo de acción local Tierras Sorianas del Cid, María Luisa Aguilera, alcaldesa de San Esteban de Gormaz, ha sido reelegida en el cargo. Buscar el desarrollo «sostenible, inteligente e integrador» es uno de los ejes principales de la actividad que desarrollan conjuntamente ayuntamientos, empresas y asociaciones.

¿Cómo definiría el territorio de Tierras Sorianas del Cid?

Es uno de los territorios más vastos  en cuanto a campo de acción, abarcando 32 municipios y con 136 socios. De alguna manera, es una columna vertebral desde Golmayo hasta Castillejo de Robledo, un territorio heterogéneo y muy variopinto no solo en la identidad de cada uno de los ayuntamientos sino también de las asociaciones que lo configuran y las necesidades de cada uno en función de la distancia con la capital. No es lo mismo hablar de un municipio tan próximo a la capital como es Golmayo, donde los servicios están mucho más cercanos, que de Langa de Duero, Castillejo o Montejo de Tiermes, donde las carencias se agravan.

Es un grupo que funciona muy bien, cohesionado y que sabe trabajar para poner en común las necesidades y, sobre todo, aplaudir todos los proyectos de innovación que llegan. Ygracias a estos grupos se gestionan los fondos europeos que pueden ayudar a afrontar iniciativas que siempre son bienvenidas en una provincia que adolece de mucho. 

En los grupos aflora esa necesaria colaboración público-privada. La parte pública está garantizada con la presencia de los ayuntamientos, elementos esenciales para desarrollar iniciativas y buscar soluciones; y la parte privada, con las asociaciones sin ánimo de lucro que cada vez proliferan más, y el mundo empresarial, la parte privada, necesaria y esencial para cohesionar el territorio. Esos tres vectores se van desarrollando y cada vez se aplaude más que las asociaciones aporten a esta búsqueda de dinamizar e innovar en el territorio. 

¿Qué líneas principales destacaría en cuanto a proyectos que se han puesto en marcha?

Si tuviera que resumirlo, lo plantearía en estrategias de emprendimiento para la mujer rural, con un incremento en los últimos años y una tendencia que se viene repitiendo desde el inicio de los grupos hace ya 20 años; los proyectos relacionados con la transformación -una asignatura pendiente en la que ya se está trabajando- y el sector primario, con un repunte muy importante; y los de innovación y nuevas tecnologías, en empresas ya existentes y las que se pongan en marcha, con el reto por delante que es la digitalización y la tecnología más puntera. Y añadir que se está trabajando mucho en el campo turístico, con propuestas muy interesantes y donde también la innovación es la característica común de todas ellas. 

La vitivinicultura también se presenta en parte de esta zona como un motor de desarrollo importante, ¿cómo se apoya a este sector?

Estos proyectos ya son subvencionables y desde que se ha abierto esta posibilidad la captación de nuevas iniciativas pero, sobre todo, las propuestas de bodegas que están ya implantadas o las que pretenden hacerlo ha sido exponencialmente una de las demandas más solicitadas.

¿Qué avances destacaría de Tierras Sorianas en esta última etapa?

Fundamentalmente, la actividad que económica que se genera y la creación de puestos de trabajo, superando los 100 directos y unos 240 vinculados. Estamos hablando de más de 20 proyectos y casi 16 millones de euros en los últimos años. Sobre todo, el gran impulso a la modernización y a la innovación, con la apuesta por las nuevas tecnologías que han hecho empresas existentes y el grado de cualificación que presentan las que se van a implantar.

Y un ámbito en el que se han abierto los grupos de acción local son las intervenciones medioambientales. Uno de los proyectos que para nosotros es muy satisfactorio por la gran participación en el Aula de Agroecología que se desarrolla todos los años con casi 144 alumnos que deciden seguir formándose, aprendiendo y aportando lo mejor de este valor añadido que tenemos, que es el sector primario y la transformación que se tiene que empezar a realizar en este territorio. 

Como también se pretende hacer a través de otro gran proyecto del que formamos parte, como Terralimenta. Los grupos de acción local siempre tejen redes de colaboración con otras entidades, agentes sociales, económicos, culturales, medioambientales... implantados no solo en los territorios, sino en provincias limítrofes y con la propia comunidad autónoma.Esa red implica tener un conocimiento e información de todas las iniciativas y lo que se mueve en estos ámbitos, interesarnos por ellos. Terralimenta es una voluntad que siempre tuvo Tierras Sorianas y que debemos continuar. Es más lo que se aprende y las sinergias que podemos llegar a generar que el mantenernos al margen.

¿La vivienda y los servicios son otras áreas en las que se quiere incidir?

Desde que entramos en la red SSPA, tenemos que ir en paralelo con lo que se avanza en provincias tan activas como Cuenca y Teruel. Hubo varios estudios que se llevaron a cabo para evaluar la dimensión del problema, sobre externalidades ambientales positivas que se podían generar en estos territorios; sobre la fiscalidad diferenciada, que está teniendo eco; y sobre vivienda y servicios, que se va a presentar en breve. La vivienda es un ámbito que puede generar progreso y empleo pero, sobre todo, rehabilitación de viviendas para dar una oportunidad a quienes decidan implantarse en el territorio. Una vivienda adecuada a los nuevos tiempos es una de las demandas fundamentales, junto al trabajo, generando empleo y posibilidades para los núcleos de población, respetando su identidad propia. El estudio de servicios refleja graves deficiencias en núcleos de población que debemos poner sobre la mesa y evaluar para buscar soluciones. No todos somos iguales, pero subyace esa misma carencia de servicios esenciales que tanto demandamos desde nuestros territorios.