Es su 'alter ego' artístico, pero, al mismo tiempo, una herramienta para el autoconocimiento e incluso un medio para proponer el debate social. Andrea San Andrés Lázaro creó a Heroína Punk en sus tiempos de Bachillerato en la Escuela de Arte y Superior de Diseño de Soria como «una mujer fuerte, empoderada que ayuda a la gente a crear». En realidad, insiste la joven artista soriana, Heroína Punk nació con la idea de promocionar el arte en comunidad. «Es mucho más entretenido que hacerlo yo sola en casa», señala con sentido del humor San Andrés Lázaro.
Heroína Punk es un proyecto artístico que ha ido creciendo y consolidándose en estos años alimentado por «esa chispa creativa» que ha sido distinguida este año con el premio Artemisia del Certamen de Creación Joven que concede la Concejalía de Juventud del Ayuntamiento de Soria. El arte, sostiene San Andrés Lázaro, es sobre todo riesgo, no tener miedo «a lo que salga», incluso hasta de las experiencias artísticas fallidas puede salir un trabajo singular, concluye. En su caso, el lienzo es su propio cuerpo; la 'performance' artística, el medio a través del que hace llegar al público sus propuestas.
Ese interés por el cuerpo como medio de expresión comenzó muy pronto en la trayectoria de la artista soriana. Desde que era muy pequeña se recuerda bailando, hasta el punto de que si tiene que definirse con una palabra no duda en contestar: «Bailarina». Pero a la danza suma otras muchas pasiones y facetas: la de dibujante, la de fotógrafa, cineasta, o la de bajista del grupo Metal Barbies, entre otras... La importancia del movimiento corporal va más allá de lo artístico, insiste. De hecho, en su Trabajo Fin de Ciclo (TFC) ya exploraba la búsqueda del bienestar del cuerpo a través de la expresión artística. «Llevo dos años en terapia y me he dado cuenta de que el arte te ayuda a autoconocerte», explica.
La creación artística, insiste, descubre aspectos de las personas que de otra forma no saldrían a la luz. «Es fundamental para superar las cosas malas y para hacerte sentir bien», afirma. Pero, en su caso, no se decanta por lo tradicional, sino por el arte performativo, aún muy desconocido.
Si la danza y la expresión corporal son el hilo conductor de las creaciones de Heroína Punk, el vídeo se ha convertido en el soporte en el que éstas perduran. Su página web (https://andreasanandreslaz.wixsite.com/heroinapunk) y las redes sociales son a la vez el contenedor de unas propuestas artísticas ya realizadas y altavoz de las que están en preparación, entremezclando distintas disciplinas como el dibujo, la pintura o la fotografía.
colaboración. En todas ellas, apunta Andrea/ Heroína Punk, es vital la participación de la gente. Poco a poco, asegura, las personas se van animando. Al principio, eran «mis amigos, confiesa. Pero ahora recibe colaboraciones de personas de diferentes puntos de España gracias a redes como Tik-Tok. Como, por ejemplo, para el cortometraje colaborativo que está desarrollando actualmente. «Será una obra muy experimental. La idea es que se visualicen las obras que hacemos la juventud», avanza la artista.
Su papel en este proyecto, destaca, será más de coordinar y de animar a la creatividad que la propia dirección del cortometraje en sí, una filosofía que se puede aplicar, de hecho, a todos sus trabajos artísticos. La creatividad es una fuerza poderosa.
La suma de muchas creatividades ofrece un efecto aún mayor, apunta. Pero al margen de eso, la participación es la clave necesaria sin la que sus proyectos performativos no tendrían sentido. En Ayúdame a salir, que puso en marcha en el año 2020, la joven artista daba a distintas personas una ficha «a partir de la que ellos creaban la obra». En Reencontrarme proponía un ejercicio de investigación introspectiva sobre las emociones a través del miedo, la felicidad, la ira y el amor. En La comedia de la existencia la joven artista hacía uso de todo lo que tenía a su alrededor para ser feliz. En Sohom, mediante la meditación, la danza y la pintura, Andrea San Andrés Lázaro fomentaba conectar «el cuerpo, la mente y el alma o espíritu».
Esta misma semana Andrea ponía en marcha un nuevo proyecto en el que, a través de la compra de unas fotografías, ha conseguido financiar la operación de esterilización de una gata como medio de concienciación social.
respecto, empatía. En la puesta en marcha de sus espectáculos performativos no hay límites. «Sólo los del respeto y la empatía», recalca. A partir de ahí, «hay que ver dónde llegamos». Porque el arte, reitera, es algo que necesitas sacar fuera, «casi vomitar», y no sabes a qué lugar te llevará. Ya sólo el recorrido, independientemente del resultado, propicia un 'viaje' apasionante... «y yo me lanzo a lo loco», comenta con sentido del humor.
Heroína Punk siempre estuvo en la mente de Andrea San Andrés Lázaro y poco a poco esos planteamientos artísticos fueron abandonando el mundo de las ideas para materializarse en distintos proyectos que ahora tienen corporeidad virtual a través de las redes sociales y su página web.
Su sueño, no obstante, es que ese espacio virtual se convierta también, en el futuro, en un lugar físico. Un sitio donde «compartir» el arte y crear en comunidad. «No tengo ni idea de dónde estará Heroína Punk dentro de unos años», comenta divertida. Pero sí tiene muy claro que es un proyecto artístico personal que discurrirá muy paralelo al de su propia vida y al de muchos otros artistas. Siendo como es una iniciativa artística que tiene en el autoconocimiento una de sus principales máximas, asegura, no podría ser de otra forma. «Autoconocerse es algo que lleva toda la vida», insiste.
El proyecto Heroína Punk acaba de empezar. San Andrés Lázaro sólo atisba ahora «un universo que empieza a tomar forma, a tener planetas». Poco a poco, insiste, sus creaciones se irán acoplando para orbitar juntas en un proyecto que difumina las fronteras entre lo vital y lo artístico. Por su mente ronda ya la próxima idea: recrear los arcanos mayores del Tarot.