El factor Courtois

Diego Izco
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El belga sostuvo al Real Madrid en el tercer partido del curso que dejó la puerta a cero

El guardameta salvó al equipo el sábado en el Bernabéu. - Foto: Europa Press

Es una película emitida varias veces este curso (y el pasado): el Real Madrid no mide ni ajusta los partidos, el rival presiona y ataca bien, y de repente se producen una o dos ocasiones clarísimas pero no pasa nada porque Courtois hace los milagros que sean necesarios para sostener al equipo, que termina imponiendo su superioridad sobre el adversario y hacia el minuto 80-85 mete el gol de la victoria o el de la sentencia. Fundido a negro. Fin. Aunque en el ‘remake’ del fin de semana falló la segunda parte. 

Courtois cumplió con su papel, el de portero que asegura puntos: los números de Benzema o Vinícius son los que llaman la atención este curso, pero las estadísticas del belga demuestran que el Madrid necesita una red de seguridad de garantías para jugar a lo que propone Ancelotti. Porque el italiano, al contrario que su predecesor (más cómodo en labores de férrea retaguardia y aprovechamiento del error), se ha propuesto la confección de un equipo dominante y feliz en el campo contrario: el cuadro blanco es líder de la Liga en pases buenos (3.377, casi 500 más que el segundo clasificado), de los que 1.806 se han producido más allá de la línea medular: un 57 por ciento de posesión (cuarto equipo de la Liga) para lubricar los engranajes de la maquinaria ofensiva… y, sin embargo, el Real Madrid es el quinto equipo que más disparos recibe: 77 en lo que va de competición. 

En el ideario del nuevo Madrid ‘made in Carletto’, los encuentros tienden al descontrol. Es una idea de caos bien medido, en la que el balón viaja con aparente desorganización de un lado al otro del campo… y cuando el barullo está formado, la calidad individual de los jugadores madridistas suele decidir la contienda. Pero incluso para jugar a esto hace falta cierto rigor defensivo, o al menos una pieza que lo aporte, y es aquí donde ha emergido enorme la figura de Courtois esta temporada: segundo portero de la Liga en paradas realizadas (22), solo una menos que Diego López (Espanyol). 

Ante el Villarreal dejó una de las postales de la Liga con un paradón colosal a Danjuma en el minuto 12: desde sus dos metros de altura bajó al suelo con inusual velocidad, y puso el guante firme para sacar la pelota a córner. Una acción que fijó el 0-0 a la espera de que los atacantes hiciesen el resto… pero el sábado, ni Benzema, ni Vinícius, ni Isco (que tuvo un cabezazo en la más clara de la segunda mitad), ni Asensio, ni Hazard cumplieron con su parte. 

 

Garantía

El de la sexta jornada ha sido el tercer partido en que el Madrid deja la puerta a cero de los ocho disputados. El primero, el 0-1 del Sevilla ante el Betis que desatascó Carvajal en una jugada aislada de la segunda mitad; el segundo, el 0-1 de Milán ante el Inter que rescató Rodrygo en el último suspiro. En ambos encuentros -más en el de la Champions-, la figura del equipo había sido Courtois, que también sostuvo el marcador en el 1-2 que el Madrid extrajo de Valencia en los cinco últimos minutos, a los que había llegado perdiendo. 

En la habitual disputa (un debate entre aficionados) por saber quién es el mejor portero del mundo, algunos de los sospechosos habituales están de capa caída: Ter Stegen hundido en la crisis del Barça, Oblak en la depresión del Atlético, Neuer ocultando su declive en las goleadas del Bayern e incluso el guardameta del futuro (Donnarumma) ni siquiera tiene minutos en el PSG. El camino está expedito para Courtois, que a día de hoy, todavía con 29 años a pesar de sus 12 como profesional, no tiene rival en la cima.