Con el estado de alarma aún en vigor los despidos siguen estando prohibidos. Sin embargo, las asesorías laborales han visto incrementadas las consultas de personas que se han quedado sin trabajo y, en algunos casos, tienen miedo de denunciar.

Los ERTES han supuesto un ‘muro de contención’ para los despidos en esta crisis del coronavirus. Mientras siga activo el estado de alarma cualquier extinción de contrato debería considerarse improcedente, ya que la fuerza mayor lo ampara. Pero sí se están produciendo. En Castilla y León las demandas han aumentado un 30%.

Lo ha confirmado Enrique Castillejos, miembro de la Comisión Ejecutiva de CC.OO. Castilla y León. "Realmente en el caso de Soria no es muy elevado, pero también hay algún caso", ha precisado. Y es que "esas estadísticas no se pueden comprobar con relación a los despidos si los hubiese".

Además hay casos de trabajadores que no denuncian por temor a represalias, aunque Castillejos ha matizado que "siempre existe esa situación, con covid y sin covid". "Nosotros estamos orientando para que vayan a nuestras asesorías jurídicas para demandarlas", ha añadido, y no sólo a quienes están afiliados al sindicato sino a cualquier trabajor que se encuentre en esta situación.