Desde su ermita volvía a pisar las calles de Almazán el Jesús Nazareno. Nueve días antes de La Bajada, la villa adnamantina celebraba La Subida ante un numeroso público que ha inundado las calles para ver como Goyo Ormazábal lideraba la procesión tras llevarse la subasta por 250 euros. En medio de una gran emotividad, Jesús Nazareno ya descansa en la Iglesia del Campanario a la espera de que el próximo 5 de septiembre llegue el día grande de las fiestas de Almazán.