Junta y PSOE se arrojan el Estatuto a días del 40 aniversario

David Alonso
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Gómez cuestiona al PP su defensa la norma autonómica «si gobierna con aquellos que quieren cargarse las autonomías», mientras Carriedo defiende los avances sociales logrados desde 1983

El portavoz socialista, Luis Tudanca, (d) conversa con varios miembros de su grupo antes de la sesión. - Foto: Rubén Cacho (Ical)

Cuándo faltan tres días para que el Estatuto de Castilla y León cumpla cuatro décadas en vigor, Junta y Partido Socialista enquistan sus diferentes visiones sobre su aplicación en la Comunidad, perpetuando las realidades paralelas que cada bando del hemiciclo esboza sobre la región. En esta ocasión fueron la viceportavoz del Grupo Socialista, Patricia Gómez, y el portavoz de la Junta, Carlos Fernández Carriedo, los que cruzaron acusaciones, ataques, datos y opiniones sobre la norma básica autonómica, y que se suman a la polémica por la no concesión de la Medalla del parlamento por falta de consenso. En su primera intervención, el también consejero de Economía, sentenció que la Junta «cumple» con los principios del Estatuto, y cimentó su afirmación en que «garantiza servicios públicos de calidad al ser referencia en educación, sanidad, servicios sociales y dependencia, trabaja por un empleo de calidad y para rebajar la tasa de paro, y realiza un esfuerzo en I+D+i al estar entre las cinco mejores comunidades en España en inversión y esfuerzo tecnológico».

«Leemos de manera diferente el Estatuto», ironizó la socialista. «Cómo van a defender el Estatuto cuando gobiernan con aquellos que quieren cargarse el Estado de las Autonomías, con un vicepresidente que dijo que era una estafa y una ruina para los españoles», espetó Gómez en su turno de réplica,  donde enumeró los, según ella, «incumplimientos» de la Junta sobre la norma autonómica. Listado que comenzó censurando que la Junta no respeta un Estatuto que subraya la importancia de las organizaciones empresariales y sindicales; recordó igualmente que el documento apuesta por la igualdad de oportunidades y la defensa de las víctimas de violencia de género, capítulo en el que la socialista lamentó que «no se destinado un euro a combatir esta lacra»; y concluyó afeando a las Cortes y a su presidente, Carlos Pollán, que «hayan decidido no conceder ni un segundo de iluminación en el edificio ni un minuto de silencio a pesar de que ya son 1.700 las asesinadas».

«Deduzco por su intervención que Castilla y León avanza muy bien. Yo le hablo de paro, educación, servicios públicos, acceso a la vivienda, empleo... y usted me responde con opiniones e ideología», ironizó Fernández Carriedo ya en la dúplica, que concluyó manifestando el «compromiso con una tierra que avanza y que merece todo nuestro esfuerzo y dedicación».