Ana Sarnago, una alumna de Derecho con 28 matrículas

A.P.L.
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Tras su paso por el Calasancio y el BIE del IES Machado, la adnamantina estudió la carrera en la Universidad Autónoma de Madrid

Ana Sarnago, una alumna de Derecho con 28 matrículas - Foto: Eugenio Gutierrez Martinez Eugenio Gutiérrez Martí

Tras su paso por el colegio Calasancio y el IES Antonio Machado, la joven adnamantina Ana Sarnago Sualdea ha terminado la carrera de Derecho con un expediente impecable, con 28 matrículas de honor y primera de su promoción. De familia con tradición jurista y en los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, del Bachillerato de Investigación y Excelencia (BIE) en Ciencias Sociales del Machado destaca los «buenos profesores» y la posibilidad de investigar sobre el sistema penitenciario, el tema que escogió al considerar que era «muy interesante». Decidió estudiar Derecho porque siente «verdadera pasión» por  esa materia que siempre le ha interesado, «al terminar la carrera hace un par de días me he dado cuenta de que es a lo que realmente me quiero dedicar».

La joven, de 21 años, califica como «excelente» a la Universidad de Autónoma de Madrid, sobre todo en Derecho (se sitúa en primer lugar en los ranking). Sus preferencias son el Derecho Civil y el Derecho Penal y ha realizado el Trabajo de Fin de Grado (TFG) sobre Derecho de Familia y custodia compartida. «Lo expuse el martes y me felicitaron por él», destaca ilusionada. Por ello, se encaminará hacia esas ramas. Mientras, seguirá en la misma universidad para realizar el Máster de Acceso a la Abogacía. Aunque también tenía plaza en la Carlos III, prefiere seguir en la Autónoma porque ya se siente «como en casa».

La joven obtuvo la matrícula para el acceso a la universidad y también ha obtenido becas de Excelencia de la Comunidad de Madrid en tres cursos. Igualmente, está vigente una beca de colaboración de la Universidad Autónoma y está investigando para este mismo centro sobre la vacuna covid obligatoria y el pasaporte covid. Ya ha podido realizar prácticas «para ver lo que es el mundo de la abogacía» y en el mes de julio estará de becaria en el mismo despacho en el que empezó a tomar contacto profesionalmente con este campo. «Ese mundo me está gustando pero no descarto hacer oposiciones. De momento quiero terminar el máster y ver hacia donde puedo encaminar mi futuro», indica sin descartar poder ejercer en su pueblo, Almazán. «La gente lo necesita y da igual donde se encuentre. Si puedo prestar mi ayuda en Almazán no me importaría hacerlo», añade.

Sobre el esfuerzo que supone el Derecho, cree que «esta carrera no es solo estudiar, sino también comprender para poder aprender. Lo importante es saber aplicar tus conocimientos a todas las situaciones en base a los ejemplos que te han enseñado». «Es indudable que requiere mucho esfuerzo, pero también te da mucha satisfacción cuando ves los resultados y empiezas a comprender cómo funciona el mundo, porque estamos rodeados de Derecho», reflexiona sobre lo gratificante de esta carrera universitaria. A pesar de lo que supuso la pandemia, se muestra contenta de estar ya graduada y destaca lo bien que se adaptó la Autónoma y su profesorado a la situación, «dando una respuesta muy rápida».

Ana Sarnago Sualdea confiesa que desde pequeña no lee libros, sino que los «devora», y de ahí su afición por la escritura. «Uno de mis pasatiempos es ir a la Feria del Libro», comenta durante la entrevista con El Día de Soria. Además, ganó un premio en un concurso de cuentos sobre violencia de género en el IES Machado y también el II Premio Nacional Antonio Machado en la modalidad de narrativa en relación con la Agenda 2030, por lo que tuvo la posibilidad de visitar el Congreso de los Diputados con motivo de la entrega de premios. Además, es cinturón negro de Taekwondo.

«Almazán es mi casa», explica, «siempre he estado ahí». «Tanto en Almazán como en Soria me han dado la mejor formación posible, a día de hoy la provincia tiene la mejor educación de España y estoy muy contenta con ser soriana», enfatiza. Tras tanto esfuerzo estudiando y esfuerzo recompensado, «uno no se pierde las fiestas, ni de Almazán ni de Soria». Así que está lista para descansar unos días y disfrutar después de las fiestas de San Juan.