Todavía hay 5 jugadores aislados y, como pronto, cuatro de ellos volverían a la cancha este jueves. Pero hoy, el Balonmano Soria ha regresado a la cancha después del brote por coronavirus que había paralizado al equipo.

Lo ha hecho con la vista puesta en su próximo compromiso liguero, el sábado ante el BM Cuatro Valles. "El equipo ha hecho los deberes y está bastante en forma", ha asegurado Jordi Lluelles. Y es que los jugadores han combatido la atrofia que supone estar en casa parados durante diez días con un trabajo pautado por el club.

No obstante han adaptado los entrenamientos de esta semana "con el objetivo de llegar al máximo nivel de competición para este fin de semana". "Ha habido una reorientación de la preparación física porque te obliga por este parón, va a estar orientada más al corto plazo, todo va a ser más específico", ha añadido el entrenador.

Ahora piensan en ese "viejo rival conocido", el BM Cuatro Valles que penalizó en casa a los sorianos la pasada temporada. "Viene de hacer un mal resultado ante el UVA de Valladolid y vendrá aquí imagino con ganas de reencontrarse con la senda de la victoria, cosa que no vamos a permitir nosotros", ha dicho.