La Fundación Pedro Navalpotro ha financiado un sistema de recogida de agua para el Hospital General de Referencia de KIPUKI, situado en Kafakumba en la República Democrática del Congo, donde no contaban con una red de abastecimiento de agua. Antes, el hospital se abastecía de un pozo artesanal, algo que resultaba complicado en temporadas de sequía. Este proyecto afectará de manera positiva y directa a 138.897 personas, ayudando de manera indirecta también a la población de Kafakumba de la Zona de Salud.

Gracias a la ayuda ofrecida por la fundación, se podrá instalar un depósito de cinco mil litros para almacenar agua de lluvia dentro del recinto hospitalario, la cual se transportará mediante canalones, situados de forma estratégica para recoger la mayor cantidad de agua disponible. Este tanque se ha instalado entre la Maternidad y la Sala de Operaciones, lugares en los que se demandan mayor cantidad de agua, y cuenta con un grifo para poder utilizar el agua almacenada. En las temporadas secas, el depósito contará con una bomba para poder almacenar agua procedente del pozo artesanal.

Pese a este avance, la fundación señala varios puntos que aún no se han solucionado. En primer lugar, Kafakumba no cuenta con un sistema de abastecimiento de agua aconsejable, teniendo que acudir a fuentes antíguas o ríos.

Por otro lado, el hospital, al tener falta de agua, no funciona de manera correcta en tareas básicas que precisan de agua potable, como la limpieza. También, a causa del transporte de grandes cantidades de agua, muchas personas, especialmente mujeres, padecen problemas de espalda. Y, por último, la escasez de agua es el origen de muchas enfermedades, disminuyendo mucho la calidad de vida y convirtiéndose en la base de la mortalidad infantil temprana al provocar diarreas, fiebres tifoideas y favoreciendo la malaria.