La economía soriana recobra posiciones prepandemia

A.I.P
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El número de parados se sitúa en 3.148, medio millar menos que en 2019; hay 1.043 afiliados más y crecen levemente las actividades económicas hasta las 6.962

La economía soriana recobra posiciones prepandemia - Foto: E.G.M Eugenio Gutiérrez Martínez

La 'normalidad' económica ha llegado a la provincia de Soria y la pandemia parece que no solo es pasado estas navidades desde el punto de vista epidemiológico y social, sino que las estadísticas han retomado las posiciones de 2019. Incluso, en algunos casos han mejorado. Esto no quiere decir que los sorianos sean ajenos a la desorbitada inflación (7,2%) o a las dificultades como consecuencia de la crisis económica mundial provocada por la guerra, el coste de la energía y la escasez alimentaria. Dependiendo del color con el cristal con que se mire, unos auguran una recesión sin retorno; otros ponen en valor que España es la cuarta economía de la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico) que mejor ha evolucionado en 2022. En cualquier caso, las estadísticas dicen que la situación del empleo mejora levemente respecto a 2019 y también que hay más empresas. Aunque, como es lógico, existen matices. Eso sí, el padrón provincial es lo que está en caída libre y la sanidad continúa 'tocada' tras padecer más de dos años y nueve meses pandémicos.

Así las cosas, la estadística del pasado mes de noviembre del Servicio Público de Empleo (Sepe) indica que Soria cuenta con 3.148 parados, mientras que en el mismo mes de 2019 un total de 3.656 trabajadores se encontraba sin empleo. Son 508 desempleados menos, aunque hay que tener en cuenta que la tasa de paro es más alta que antes de la pandemia: en el tercer trimestre de 2022, la Encuesta de Población Activa (EPA), la situó en el 8,03%, mientras que en el mismo periodo de 2019 era más baja, del 7,05%. La última EPA publicada también señala la tasa de actividad en el 60,37% (60,55% en 2019) y la de empleo en el 55,53% (56,28% tres años antes).

No todas las actividades económicas han sufrido por igual la crisis sanitaria y económica. De este modo, la distribución provincial de los activos en la última EPA coloca al sector servicios en el 59,6% (60,9% en 2019); el empleo aumenta en la industria, a pesar de circunstancias como la escasez de semiconductores en la automoción o de otras materias primas que afecta directamente a la producción, y el porcentaje se eleva al 22,6% (20,8% en el tercer trimestre de hace tres ejercicios); baja en la agricultura al 8,8% (9,9% en 2019); crece en la construcción hasta el 6% (5,3% hace tres años); y se mantiene en el 3% aquellos que no tenían empleo anteriormente.

Hay que destacar que hace un año entró en vigor el Real Decreto-ley de Medidas Urgentes para la Reforma del Mercado Laboral que, entre otras cosas, afecta a la contratación y la negociación colectiva. Así, el contrato de trabajo ordinario es el indefinido y solo se contemplan dos tipos temporales, el formativo y el estructural. Estos cambios influyen, lógicamente, en las estadísticas de desempleo. Para el Gobierno suavizan los efectos de la temporalidad, en aras de la estabilidad laboral. Sin embargo, desde las filas de la oposición exigen un indicador complementario que diferencie el paro registrado del 'efectivo', ya que consideran que el aumento de los contratos fijos discontinuos firmados desde la entrada en vigor de la reforma laboral altera la estadísticas.

seguridad socialMÁS AFILIADOS

Otro dato positivo es el de la afiliación a la Seguridad Social. Las últimas cifras corresponden a noviembre, con 40.657 en Soria, mientras que en el undécimo mes de 2019, cuando aún faltaban tres meses y medio para que se decretara el estado de alarma por la pandemia, la cifra de afiliados era de 39.614.  

Lo que más ha crecido es el Régimen General, con 31.363 afiliados frente a los 39.614 de hace tres años,  ya que el número de autónomos apenas ha variado en este tiempo, con 6.208, según la última estadística, y 6.205 en 2019. Bajan de manera más relevante los afiliados del Sistema Especial para Trabajadores Agrarios (SETA), de 1.678 antes de terminar el año 2019 a 1.606 en 2022; los empleados de hogar, de 742 a 632; y los afiliados al Régimen Especial Agrario, de 870 a 847.

más empresas... ...EN ALGUNOS SECTORES

Los datos del INE correspondientes al número de locales activos (CNAE,  Clasificación Nacional de Actividades Económicas) arrojan un resultado positivo teniendo en cuenta que en noviembre de 2022 la cifra se elevó a 6.962 y en 2019 se situó en 6.830. Hay 132 negocios más, atendiendo a esta fuente, si bien el propio INE cifra en 5.690 el número de empresas activas en la provincia en 2022, 59 más que en 2019, cuando registró un dato de 5.631.

Evidentemente, el comportamiento de los sectores ha sido desigual en este periodo y en unos casos han crecido, pero en otros, la brecha ha sido grave. Por poner algunos ejemplos de unidades locales activas (INE) que han ido a menos, la industria de alimentación ha perdido siete locales en tres años y se queda con 124, al igual que la de la madera, que ya arrastraba una crisis estructural y ha pasado de 97 en 2019 a 91 en 2022. En los mismos términos ha evolucionado la fabricación de muebles, que se queda con 51 unidades en activo, una decena menos. También hay menos negocios dedicados a la construcción de edificios, 533 en 2022 frente a las 554 de hace tres años, y el comercio al por menor, sin duda, es de las actividades más afectadas por las restricciones derivadas de la covid, pasando de 1.089 locales en 2019 a 1.042 en la actualidad.

Por el contrario, algunos epígrafes de actividades económicas se han visto engrosados como es el caso de la fabricación de bebidas, que ha aumentado de 11 a 19; aquellas firmas en torno al suministro de energía eléctrica, gas, vapor y aire acondicionado, con un salto de 62 a 92 locales; los establecimientos de venta y reparación de vehículos, de 154 a 160; el comercio al por mayor, de 345 a 351; los servicios de alojamiento, de 192 a 199; los de comidas y bebidas, de 546 a 561; empresas de informática, de 14 a 21; las unidades dedicadas a las actividades inmobiliarias, de 350 a 370; y los de alquiler, de 46 a 59. 

Hay que poner el acento en el incremento de unidades locales activas de actividades sanitarias, de 170 a 189 desde 2019 a 2022, así como las dedicadas a la asistencia en unidades residenciales, que ha crecido de 34 a 37. 

También aumentan las empresas artísticas, de creación y espectáculos, de 59 a 70 en este trienio, y las unidades locales activas de publicidad, de 36 a 51. Sin embargo, caen los negocios de juegos de azar y apuestas, ya que en noviembre de 2019 operaban 45 en la provincia y en el mismo mes de este año, 38.

Respecto al desglose de empresas por condición jurídica, antes de la pandemia, en Soria, según el INE, estaban en marcha 134 sociedades anónimas, una cifra que se ha reducido hasta las 122. Bajan igualmente las comunidades de bienes, de 414 a 391; y las cooperativas, de 49 a 40. Por el contrario, han ido en aumento las sociedades limitadas, de 1.621 a 1.600; los organismos autónomos, de 35 a 39; y otras formas de empresa, de 284 a 319. Caen ligeramente las registradas como personas físicas, de 3.094 en 2018 a 3.080 en 2022.

siniestralidad laboralMÁS LEVES Y MORTALES

Los datos de siniestralidad laboral evidencian que el panorama apenas ha cambiado a pesar del 'paréntesis' de la pandemia. Lamentablemente, las cifras altas se han recuperado al mismo ritmo que la actividad económica. En el acumulado a octubre de 2019, en la provincia de Soria se contabilizaron 1.150 accidentes leves; 15 graves y uno mortal. En total, 2.953, una cifra superior al mismo periodo de 2022, que suma 2.854 siniestros laborales, pero no por eso es más positiva: han aumentado los siniestros de carácter leve hasta los 1.240, se han reducido los graves a doce y hay que poner el acento en que se han registrado cinco mortales (dos en la industria, dos en el sector servicios y uno 'in itinere').

En cuanto a las enfermedades profesionales, apenas hay cambios, con 152 en el acumulado anual a octubre de 2019 (un centenar sin baja) y 150 este año (93 sin baja).

Menos pensionistasMAYOR RETRIBUCIÓN

Las peores consecuencias del coronavirus tienen su reflejo en las estadísticas de perceptores de las pensiones. Así las cosas, en diciembre de 2019 el número de pensionistas en Soria ascendía a 22.589, mientras que el dato difundido esta semana por el Instituto Nacional de la Seguridad Social es de 22.439.

Las mismas fuentes indican que 15.177 jubilados perciben en la actualidad una retribución media de 1.183,17 euros; 1.220, por incapacidad permanente, 1.027,92 euros; 5.255 perceptores por viudedad, 725,96 euros; 702 en situación de orfandad, con una media de 470,46 euros mensuales; y 85 a favor de familiares, 636,58 euros. Con la revalorización de las pensiones en estos tres años, la paga media en la provincia de Soria supera los 1.043 euros, mientras que a 1 de diciembre de 2019 se situó en 930,17 euros.

Cabe puntualizar que el último Consejo de Ministros de 2022 aprobó una subida general de las pensiones del 8,5% y mantiene el aumento extraordinario del Ingreso Mínimo Vital (IMV) y de pensiones de jubilación y de invalidez no contributivas. Supone 1.500 euros más  al año para una pensión media de jubilación.

el azote de la inflaciónLA VIDA 'SUBE' UN 6%

A pesar de que desde agosto la inflación está cediendo (en julio en Soria se disparó al 12%), el Índice de Precios al Consumo (IPC) continúa desorbitado. En noviembre se situó en el 7,2%, un dato muy alejado del mismo mes de 2019, cuando se colocó en el 1%. Es decir, los consumidores sorianos compran un 6% más caro que antes de la pandemia. Cabe matizar que en noviembre de 2020 fue negativo (-1%) y un año después ya ascendió al 6,5%. Y es que la 'paralización' de la actividad económica y las restricciones a partir de mediados de marzo de 2020 implicaron una merma sustancial de la demanda y, por tanto, el fantasma de la deflación planeó sobre la economía de todo el mundo.

El Gobierno aprobó esta semana, en el último Consejo de Ministros, un nuevo paquete de medidas para contrarrestrar la elevada inflación que asfixia a los hogares y para proteger a los más vulnerables. Entre otras cosas, el Ejecutivo rebaja el IVA del 4% al 0% a los alimentos de primera necesidad y del 10% al 5% para los aceites de oliva y de semillas y la pasta; acuerda una ayuda de 200 euros para las familias con rentas de hasta 27.000 euros; y prolonga la rebaja de los impuestos de electricidad y gas.

la 'huella covid' turísticaMÁS CERCA DE LO 'NORMAL'

La peor parte de las restricciones derivadas de la covid se la llevó toda aquella actividad vinculada al ocio. Retomando los datos del INE en torno al número de empresas, en el epígrafe 'Comercio, transporte y hostelería' se han perdido negocios respecto a 2019, pasando de 2.159 a 2.127 (32 menos).

Si la referencia es la 'Encuesta de Ocupación Hotelera' del INE, aunque los datos han mejorado sustancialmente en el último año, aún no se ha llegado a la situación prepandemia. Así, en noviembre de 2019 se contabilizaron 17.101 viajeros, mientras que en el mismo mes de 2022 han sido 16.105, casi un millar menos. Y lo mismo ocurre con las pernoctaciones, con 32.814 en el undécimo mes de 2019 y 31.654, este año. Hay que tener en cuenta que en noviembre de 2020 apenas se contabilizaron 2.020 viajeros y 7.965 pernoctaciones, y en 2021 los datos se tradujeron en 14.510 y 26.476, respectivamente. Por ello, aunque aún no se ha llegado a la 'normalidad' turística anterior a la covid, los resultados pueden considerarse optimistas por la escasa diferencia con los recabados en 2019.

En cuanto la 'Encuesta de Ocupación en Alojamientos de Turismo Rural' arroja una evolución similar a la hotelera. Por ejemplo, el grado medio de ocupación de las plazas el pasado mes de octubre fue del 18,60%, ligeramente inferior al mismo mes de 2019, cuando se situó en el 18,76%. Sin embargo, hay más diferencia en la ocupación por plazas en fin de semana con un 36,80% este año y un 52,73% hace tres ejercicios. En este dato confluyen, más allá de las eventualidades derivadas de la pandemia, otros factores como la temporada micológica o el tiempo,  entre otros factores.

En el ámbito turístico hay que poner de manifiesto que Soria se ha sumado al auge de la viviendas para este uso, tal y como publicó El Día de Soria en su edición del 17 de diciembre. Solo en 2022 se han dado de alta más de medio centenar de alojamientos (VuT) de este tipo de un total de 172 registrados por la Dirección General de Turismo de la Junta de Castilla y León.

los datos demográficos...... EN LA SENDA NEGATIVA

Lo que parece que no tiene retorno, al menos de manera inminente, con o sin pandemia de por medio, es la despoblación soriana. El pasado 21 de diciembre se hicieron públicos los datos definitivos del padrón y, a 1 de enero de 2022, la provincia de Soria contaba con 88.377 habitantes, 370 menos que el año anterior, con 88.747. Y eso que, a pesar de la incidencia de la covid en la demografía, la misma fuente del INE situó el número de habitantes en Soria en 88.747 a 1 de enero de 2021, 111 más que en a primeros de 2019, aunque 137 menos que en el ejercicio anterior. Así, respecto al 1 de enero de 2020, antes de que estallara la pandemia, la pérdida ha sido del 0,57% de la población provincial.

El saldo vegetativo sigue siendo negativo. Según el último dato de defunciones publicado por el INE (correspondiente a la última semana de noviembre), el acumulado del año se eleva  a 1.164 (un 10,71% más respecto a 2019), mientras que el número de nacimientos hasta finales de octubre asciende a 445. Por lo tanto se han producido 719 decesos más que nacimientos.

Sobre estas cifras cabe realizar dos puntualizaciones. En relación a los fallecimientos, en el mismo periodo acumulado de 2020 (hasta la semana 48, finales de noviembre) se registraron 1.423 muertes, 372 más que en el mismo periodo de 2019, lo que evidencia la tragedia que supuso la covid ese año. La cifra ya se contuvo en 2021 y se anotaron 1.090 defunciones, 39 más que en 2019, pero  333 menos que en el mismo acumulado del año anterior. Y en cuanto a los nacimientos, la evolución ha sido la siguiente: de enero a octubre de 2019, el INE contabilizó 483; cuatro más en los mismos meses de 2020, es decir, 487; la cifra cayó sustancialmente en 2021, hasta los 428 nacimientos hasta finales de octubre; y en el mismo periodo de este año son 445, por lo que se observa un leve repunte. Habrá que esperar al recuento final de 2022 para comprobar si se superan los 533 nacimientos de 2021 y el dato se aproxima a los 591 de 2020 o, al menos, a los 579 de 2019.