La soriana Ana Carrera decidió dar a luz en Zaragoza para poder estar acompañada durante todo el proceso, previo y posterior al parto. Según la vigente normativa sanitaria, esto no es posible en el Hospital de Soria, ya que aquí a las embarazadas no se les permite ir acompañadas a las consultas ni tampoco durante su hospitalización, a excepción de casos especiales. "Yo tenía claro que quería estar acompañada durante todo el proceso, porque además es un derecho que tienen también los padres", explica esta joven. En Zaragoza, los protocolos sanitarios permiten a las embarazadas estar acompañadas en los instantes previos al parto, en el momento de dar a luz y también en los posteriores o durante su ingreso en el hospital. Por ello, ella y su pareja decidieron emprender todos los trámites para conseguir el permiso de dar a luz en el Hospital Miguel Servet. Sin embargo, la situación se complicó cuando ella, durante su estancia previa al nacimiento de su pequeño, Nuei, se contagió de coronavirus y tuvo, finalmente, que dar a luz sola. No obstante, a excepción del momento del parto, su pareja fue sometido a una prueba PCR y al dar negativo pudo acompañarle, bajo su responsabilidad, hasta que fue dada de alta. Asegura que las mujeres como ella terminan sintiéndose "solas ante un paso tan importante", destaca.