Puertas Normas encadena cinco años consecutivos de beneficios y con una facturación que no deja de crecer. El año pasado ascendió a 32 millones de euros. La dirección de la empresa garantiza que no hay ninguna intención de deslocalizar la fábrica de San Leonardo de Yagüe. De hecho, acaba de incorporar el tercer turno, aunque de manera discontinua porque la demanda es muy alta pero hay muchos problemas con las materias primas. La compañía trabaja en la transformación de la plantilla para adaptarla a nuevos perfiles. Y su reto es llegar a exportar el 50% de todas las puertas que produce, 525.000 unidades en 2021.
El Director General, Eduard Mundet, asegura que "no hay ningún plan de dejar de fabricar puertas aquí". "Lo que vamos evolucionando es el tipo de puertas que hacemos en esta fábrica", apostilla.
Nuevas líneas de negocio que pasan por modernizar algunos procesos para la fabricación de armarios o de puertas acústicas o cortafuegos. Y todo ello requiere una transformación de la plantilla para adaptarla a nuevos perfiles profesionales. "Hoy día se necesita mucha más gente que hable idiomas, muchos más ingenieros, y también que algunos operarios se vayan transformando y puedan ocupar otros puesto distintos al de simplemente levantar una puerta, y eso ya va ocurriendo", explica Mundet.
En marzo hubo diez despidos. Con todo la fábrica da trabajo directo a 200 personas, el 35% por mujeres. Su actividad se intensifica y acaba de incorporar el tercer turno, eso sí, de manera discontinua por la inestabilidad del mercado. Y es que las importaciones de materia prima son muy complejas por los precios de los transportes y porque "algunos países tienen cerradas las fronteras a la exportación de ciertas maderas, en concreto las que nosotros usamos, y eso hace que el mercado principal de compra sea el nacional y los productores han establecido cupos".
Con todo Norma Doors espera superar la producción del año pasado, y a medio plazo duplicar las cifras de exportación, actualmente el 25% de las puertas y armarios que fabrica.