La delegada del Gobierno en Junta de Castilla y León, Yolanda de Gregorio, confirmó hoy que el viernes, sábado y domingo, se registraron 200 positivos COVID, un dato "previsible" después de la Semana Santa, y señaló que la situación es "estable" a nivel hospitalario, a pesar de que los casos van en aumento. "Ahora mismo hay 15 hospitalizados y ninguno en UCI. Lo bueno es que el cuadro que cursa la enfermedad es leve", indicó.
Asimismo, pidió prudencia a la sociedad, y pidió que, a pesar de no ser obligatorio, se recomienda utilizar la mascarilla en aglomeraciones y aquellas personas que cuentan con otras patologías.