Inician la topografía en 3D de La Fuentona

A.P.L.
-

El equipo del UTD, dirigido por el instructor de buceo Alan Weinberg, cree que es «un proyecto interesante en una cueva mítica»

Inician la topografía en 3D de La Fuentona - Foto: Eugenio Gutierrez Martinez. Eugenio Gutiérrez Mar

Un equipo de buceadores de United Team Diving (UTD), con el instructor Alan Weinberg al frente, ha comenzado a realizar la topografía del primer sifón (zona sumergida) de La Fuentona para reflejar su morfología exacta en un documentación que puede ser muy útil para las administraciones y a nivel turístico. «Es un proyecto que estamos empezando, todavía está muy verde», reconoce el buceador detallando que además se hará una fotogrametría, una técnica que utiliza fotografías superpuestas para elaborar un modelo 3D y plasmar las características de la cueva. «Es una técnica que se usa para documentar barcos hundidos. Por ejemplo, en el cabo de Palos lo están haciendo para documentar los diferentes bajos», añade Winberg. Hasta ahora había bastantes croquis, pero poco precisos.

Para Alan Weinberg, es un proyecto «diferente» que creen que puede «traer valor» para mostrar lo que esconde en su interior, a nivel turístico e informativo (a modo de advertencia), y para documentar bien la morfología a nivel geológico. Es, además, una iniciativa «a medio plazo», porque acceder a la cueva requiere sus permisos y porque requiere su tiempo coordinar al equipo, compuesto por seis instructores y buceadores de UTD de Madrid, Valladolid y Cádiz. «Lo hacemos con equipos de seis, por disponibilidad y por seguridad, porque buceamos en binomios y trinomios, con la idea de repartir las tareas», comenta.

Además de la topografía, se está cambiando la línea principal de hilo guía por mantenimiento y que sea seguro para los espeleobuceadores. «El que hay lleva bastante tiempo y en algunos sitios se deteriora, porque cuando La Fuentona descarga a veces el hilo se rompe y hay que reemplazarlo», por lo que una parte de este proyecto es repasarlo, colocar la línea y poner marcadores cada 50 metros y en la primera zona de la cueva también cada 10 metros.

El proyecto surgió porque hay distintas iniciativas a nivel nacional, como por ejemplo, en la Cueva del Agua, en Murcia, pero no en la zona Norte. Así que pensaron que podría ser «un proyecto interesante en una cueva tan mítica como La Fuentona».Hay otras cuevas en la zona Norte, como el Pozo Azul, en Covanera (Burgos), pero «es un tubo de 14 ó 15 kilómetros con distintos sifones». «Para nosotros es una buena excusa para ir a bucear y hacer algo en particular», comenta Ana Winberg destacando su unión en torno al espeleobuceo con UTD, una organización de buceo técnico puntera que promueve distintos proyectos. Han estado en China varios años, en la cueva El Pit México y en el mar Báltico.

«Todo ha sido fuera de España y la verdad es que aquí hay muchas cosas para hacer, así que dijimos para qué nos vamos a ir a México si tenemos aquí La Fuentona», apunta sobre el origen de la iniciativa y el equipo. «Usamos los mismos protocolos, la misma seguridad, configuración homogénea de equipos... Lo que nos permite, en caso de una emergencia, tener el equipo de soporte vital en el mismo sitio. Tenemos unos protocolos muy estrictos que nos permiten garantizar al máximo la seguridad para hacer inmersiones ‘cañeras’», comenta el espeleobuceador.

Sobre La Fuentona, asegura que su objetivo«no es tanto ir cada vez más lejos, sino poder reflejar cosas interesantes, por ejemplo, del primer sifón. Se ha hecho hincapié en llegar más lejos, pero nuestro planteamiento es que ya llegaremos y mientras empezamos a documentar bien lo que es el primer sifón, que son casi 300 ó 400 metros pero baja profundo, por lo que tiene su complicación técnica, y a compartir la información». Incide en que este proyecto va a permitir ver mejor la primera parte de La Fuentona y que esa información que obtienen en sus inmersiones sea «de interés público», tanto para las instituciones como para expertos en Geología. Igualmente, pretenden «dar a conocer las bondades que hay en la provincia de Soria», porque la poza de La Fuentona despierta mucho interés, no se imaginan lo que hay dentro. «Eso es lo que nos motiva», resume.

Alan Weinberg cree que su labor es «una continuación dentro de nuestras posibilidades» de lo ha hecho durante muchos años el equipo de exploración de La Fuentona, que se mostró en el programa televisivo Al filo de lo imposible. Elogia lo que han conseguido llegando tan lejos y la documentación. «La idea es seguir lo que ellos han estado haciendo o, al menos, intentarlo», añade.

El equipo iba a estar el pasado fin de semana en La Fuentona, pero no llegó el permiso de la Junta de Castilla yLeón, así que regresarán previsiblemente en agosto.«Es un proyecto a medio plazo para venir a Soria una vez al mes o una vez cada seis semanas», contribuyendo así a la economía local, porque el equipo pasa un fin de semana durmiendo y comiendo en la provincia soriana. «Creemos que es importante este tipo de turismo deportivo», añade.

Por su parte, Juan Alberto Achica Allende, del equipo de veteranos que han buceado en La Fuentona, suele acompañar a los jóvenes a Soria en cada expedición para hacer la topografía de la cueva. «Como el equipo nos hemos hecho mayores, cada vez la cosa se restringe más en las salidas, aparte del Covid», comenta.

Destaca la relevancia de este proyecto para un mayor conocimiento de La Fuentona, completando la información que ellos han proporcionado durante años.Es un aparato que capta la morfología y las dimensiones de la cueva en tres dimensiones a través del hilo guía, «un poco laborioso». Se toma la información en datos y se traslada a un programa de ordenador, que calcula las medidas de la cueva. Cuando se concluya el estudio, se entregará al Ayuntamiento de Muriel de la Fuente y a ña Red de Espacios NaturalesProtegidos de Castilla yLeón, que son los que conceden los permisos.

Juan Alberto Achica Allende considera a este nuevo equipo como la extensión del primero. Ellos lograron mostrar los misterios de La Fuentona en Al filo de lo imposible y llegaron a los 115 metros de profundidad, el récord de La Fuentona.

Las primeras exploraciones se hicieron en 1977, con el grupo Electric Estándar (Carmen Portilla, Fidel Molinero, José Medina, Mateo Martín...) y se centraron en el primer sifón y la segunda sala. En 1984 se explora el segundo sifón, alcanzando los 100 metros de profundidad por parte del equipo de Ángel Ortega y Miguel Romans. En 2008, el equipo de DaniSantamaría y Amaya Olea descubre nuevas galerías y llega a 115 metros. A partir de ahí, se complica la exploración, una tarea muy complicada y peligrosa que requiere un equipo de mucha gente. Ahora lo que interesa es la toma de dimensiones en 3D del primer sifón y poder reflejarlo debidamente en documentación para conocer un poco más esta espectacular cueva.