El Burgo de Osma acoge hoy una jornada formativa sobre mujer y discapacidad, organizada por CERMICyL (Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad). La consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades de la Junta de Castilla y León, Isabel Blanco, ha sido la encargada de inaugurar la cita, que reúne en el Centro Cultural San Agustín a más de una veintena de profesionales de los servicios sociales.

En diversas ponencias van a hablar de maternidad y derechos sexuales, empleo, mujer y mundo rural, educación, cuidados de familiares, o buenas prácticas en atención a la mujer. Además, una abogada especialista en violencia de género y mediadora impartirá el taller 'Identifica, detecta, actúa'. 

Es la primera vez que estas jornadas tienen por escenario el medio rural. Y es que la mujer en este ámbito es más vulnerable si cabe a la violencia de género, y más si pertenece al colectivo de personas con discapacidad, tanto física como psíquica o sensorial.

La consejera ha cifrado en 85.000 las mujeres con discapacidad en toda la comunidad. Por eso ha destacado la importancia de trabajar la formación para la detección y prevención de casos de violencia machista. El objetivo es llegar a 35.000 profesionales de todo el territorio, dentro del Plan de Formación en Violencia de Género hasta 2022.

Blanco ha avanzado que, este jueves en Madrid, en una conferencia sectorial en el ministerio y con representantes de las demás comunidades autónomas, va a proponer que, como ya ocurre en Castilla y León, las víctimas de agresiones sexuales sean consideradas también víctimas de violencia de género.