"Muchas empresas van a desaparecer"

A.I.P.
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Asume su sexta legislatura al frente de FOES con el reto de conseguir la fiscalidad diferenciada para Soria. «Seguimos sin saber por qué se nos niega por parte del Gobierno de España», denuncia Aparicio

"Muchas empresas van a desaparecer" - Foto: Eugenio Gutiérrez MartÁ­nez Eugenio Gutiérrez Mar

Santiago Aparicio acaba de ser reelegido presidente de la Federación de Organizaciones Empresariales Sorianas (FOES), un cargo al que llegó en abril de 2002. Asumió una entidad casi quebrada y, tras cinco legislaturas al frente, ha conseguido sanearla y reforzarla, de modo que hoy acoge a más de 40 asociaciones sectoriales que agrupan al 67% del empresariado provincial, dando empleo además a 28 personas. Asume su sexto mandato al frente de la patronal soriana con el propósito de concluir el proyecto iniciado pero, avisa, es momento del relevo ya que será su última legislatura. 

¿Qué le ha animado a seguir?

En primer lugar, la petición que me han hecho los miembros del Comité Ejecutivo de seguir para dar continuidad a algunos temas que tenemos pendientes de concluir y que son fundamentales para Soria, como son las ayudas de funcionamiento. La ComisiónEuropea aprobó esas medidas en abril de 2021 y el Gobierno dijo sí a esa fiscalidad diferenciada, pero aún no lo ha implementado. Es algo que tenemos incompleto y que, después de ocho años batallando por ello en Europa y en España con los diferentes Gobiernos, tenemos que seguir luchando, y creo que debemos hacerlo gente que conocemos y hemos trabajado el tema.  

Y, luego, seguir con la implantación de Invest in Soria [la oficina de captación de empresas de FOES]. Tenemos muy buenas expectativas pero no es algo que tenemos consolidado y por eso queremos seguir trabajando quienes conocemos el proyecto para que no pare y pueda dar los resultados esperados y deseados. 

Estas son las tres líneas fundamentales para seguir, además de apoyar a las empresas, máxime en esta época, que es todavía más complicada que la anterior, con una grave crisis. 

¿Cuál es la situación actual del empresariado soriano?

El tejido empresarial soriano es un tejido consolidado, potente, sólido, que está acostumbrado a trabajar en una situación casi de precariedad porque todavía nos faltan infraestructuras de todo tipo que los competidores tienen, y eso lo tenemos que paliar con mucho ingenio, trabajo y capacidad de respuesta. Es un entramado muy fuerte porque, además,  está acostumbrado a llevarse grandes decepciones -sobre todo por parte de las administraciones- en cuanto a inversiones de apoyo al desarrollo económico, donde llevamos años reclamando que Soria tenga un trato igualitario al resto de provincias. 

Es fuerte pero no ajeno a la coyuntura global. Algunas empresas aún no habían superado la crisis de 2008 cuando llegó la pandemia y, tras esta, las expectativas de recuperación se han visto truncadas por la crisis de semiconductores, una espiral inflacionistas de los precios de la energía y los hidrocarburos y, ahora, la Guerra de Ucrania, la huelga del transporte… ¿Cómo está afectando todo esto a las empresas de Soria? 

Está afectando igual que al resto de empresas de España, de una manera muy negativa. Hay una espiral inflacionista muy alta que no viene de la guerra de Ucrania sino que viene de antes, porque hay que recordar que acabamos el año con una inflación del 6,5%. Eso produjo una subida de precios y que prácticamente no hubiera oferta por parte de la mayoría de fabricantes de componentes. 

Luego empezó el tema del flete de barcos, del transporte... y había una demanda brutal pero no había oferta, de modo que subieron los precios de manera exponencial. Todo ello ha hecho que los hidrocarburos, el gas y la energía hayan subido de una forma que nunca habíamos visto. Es algo desorbitado y lo estamos sufriendo con unas limitaciones a la hora de poder fabricar, con una subida de precios, con un servicio de producto no óptimo para lo que demanda la sociedad... de modo que no podemos trabajar con la seguridad y la certidumbre que se estaba trabajando.  

Y a esto hay que sumar ahora la guerra de Ucrania... 

La situación es incómoda, complicada, y se viene a agravar todavía más con la guerra de Ucrania ya que hay muchos productos (como los fertilizantes, el grano, el aluminio...) necesarios para el desarrollo de otros productos y para la alimentación humana y animal que vienen de allí, y nos está llevando a un callejón sin salida. 

Diferentes sectores están entrando en una situación de pérdidas porque se están bajando mucho los precios de los servicios para evitar esa espiral inflacionistas. Tenemos la experiencia de los años 80 en que se hizo lo contrario y se seguían subiendo precios y salarios, y eso iba aumentando la inflación; por eso ahora mismo hay que contener y contener, y esperar que sea una situación coyuntural y que en unos meses lo podamos tener resuelto. 

Comenta que hay sectores que están trabajando a pérdidas, ¿hay amenaza de cierre de empresas?

Cuando estalló la pandemia había empresas (el 30% de las pymes) que todavía no se habían recuperado de la crisis de 2008 y había un nivel de endeudamiento en España todavía alto. Vino la covid-19 y fue un mazazo tremendo porque la economía estuvo parada tres meses en todo el mundo y, después, hubo sectores que lo pasaron francamente mal porque estuvieron intervenidos y no pudieron trabajar. Y cuando parece que estábamos viendo la luz al final del túnel y se estaba empezando a coger ritmo a la empresa y a la productividad y se esperaba que fuera el año de salida de la crisis, nos encontramos con la guerra de Ucrania. Llueve sobre mojado en muchos temas y está produciendo un parón económico brutal que hace que empresas que estaban en una situación complicada no puedan ahora mismo devolver sus préstamos, hacer frente a sus gastos... y va a haber muchas empresas que, por desgracia, van a desaparecer porque no van a poder soportar la situación. 

Las empresas en buena situación económica, las saneadas y las que no sean muy dependientes de estos sectores en crisis van a poder aguantar, pero los sectores más perjudicados por esta crisis van a desaparecer. 

La queja está ya en la calle, ¿cree que  todo esto podría llegar a desencadenar un conflicto social?

Esperemos que no. Aunque en España se han tomado medidas tarde y no adecuadas, y aunque es cierto que en este país el Gobierno es el que menos ha aportado en pandemia para ayudar a las empresas, no puede cundir el pánico. Se tendría que agravar muchísimo la situación y que prácticamente todo el sector empresarial esté en pérdidas y crisis para que llegue esa situación. Eso sí, van a ser años muy complicados y difíciles en los que nos vamos a tener que apretar el cinturón, pero no creo que desencadene en un conflicto social. 

¿No le convence el nuevo paquete de medidas -Plan de Respuesta al impacto de la Guerra de Ucrania- aprobado esta semana por el Gobierno?

Creo que llega tarde y que las medidas no son suficientes ni lógicas. 

En el tema del transporte, el parón se podría haber evitado. Y ahora, por mucho que todos los ciudadanos tengamos un descuento de 20 céntimos en el combustible, la realidad es que no se ha hecho nada por favorecer a sectores que están en una situación muy complicada. Es una medida totalmente populista que no hay por donde cogerla. 

Y luego el tema de las prohibiciones que hay [en el nuevo plan de medidas presentado esta semana] en cuanto a subida de alquileres, no poder despedir... creo que es un intervencionismo que no es ni lógico ni razonable en un Gobierno como el nuestro y lo único que va a hacer es desincentivar todavía más al mundo empresarial.  

Uno de sus logros al frente de FOES es la constitución de la Red de Áreas Escasamente Pobladas del Sur de Europa (Red SSPA), de la mano de las confederaciones de Cuenca y Teruel. En abril se consiguió que la Comisión Europea dijera que estas tres provincias tenían derecho a una fiscalidad diferenciada pero, un año después, no hay nada. ¿Tiene conocimiento de por qué no ha salido adelante? 

No tenemos ninguna noticia de por qué no se ha implementado y entiendo que eso habría que preguntárselo al Gobierno y a los miembros del PSOE, porque en campaña para las Elecciones de Castilla y León daba la sensación de que no querían y que creían que no era necesario. 

Yo creo que es algo fundamental y es una deuda histórica con Teruel, con Cuenca y con Soria por la mínima involucración que ha habido por todos los Gobiernos, por las escasas inversiones y por el olvido que han tenido estas tres zonas. 

Los territorios del norte de Europa (Suecia, Finlandia y Noruega) cuentan ya con unas ayudas de funcionamiento mucho más altas que las propuestas para Soria, porque allí la densidad aún es más baja (2,5 habitantes por kilómetro cuadrado). Eso ha sido posible porque sus Gobiernos han sido proactivos a la hora de implementar esas medidas. Aquí no sabemos por qué el Gobierno de España no las pone en marcha cuando Europa ya ha dado el visto bueno y, desde luego, es una deuda por la que vamos a seguir luchando. 

Todos se ponen ahora la 'medalla' de este logro, ¿se sienten de algún modo utilizados a nivel político? 

Utilizados a nivel político no, porque nosotros hemos hecho nuestro trabajo. Ya sabemos que los políticos se quieren poner las 'medallas' y todos dicen ser los que lo han hecho, pero la realidad es que ningún partido ha hecho nada como lo que hemos hecho nosotros en ese sentido, y eso lo tenemos claro y la gente lo sabe. Ha sido un trabajo ímprobo de más de ocho años en el que los empresarios de las tres provincias hemos hecho un esfuerzo titánico con dinero que ha salido de nuestro bolsillo para conseguir este objetivo que es fundamental para la atracción de empresas pero, también, para los empresarios que hemos sufrido mucho y resistido porque somos gente tenaz, trabajadora y comprometida. 

Con nuestro esfuerzo hemos conseguido una situación que nos corresponde y seguimos sin saber por qué se nos niega por parte del Gobierno de España. 

Menciona la necesidad de esta fiscalidad diferenciada para captar empresas. En ello trabajan desde Invest in Soria, ¿se espera la llegada de nuevas inversiones a la provincia al amparo de esta oficina?

Sí, estamos hablando con muchas empresas a nivel nacional e internacional y tenemos un buen portfolio de contactos, aunque no podemos ignorar que es complicado. Para hacernos una idea, por Invest in Spain, que gestiona el ICEX [Instituto de Comercio Exterior], pasan muchísimas de las grandes inversiones que se hacen en España y, de cada cien, sale una. Quiero decir con ello que no es fácil porque hay 56 provincias en España que están en la misma situación que nosotros y también quieren llevarse la inversión. Por eso es importante contar con herramientas potentes que sean competitivas para atraer inversión a nuestro territorio. 

¿En qué herramientas hay que trabajar para hacer competitivo Soria?

Estamos trabajando para que todo el suelo industrial que haya enSoria cuente con última tecnología y por tener una serie de incentivos. Dentro de esto, es importante que, de los gastos laborales de la empresa, se pueda ayudar hasta el 20%, porque eso puede hacer inclinar la balanza de las empresas hacia estas zonas. Por eso es importante seguir trabajando por esas ayudas de funcionamiento. 

¿Las empresas les manifiestan que disponer de una fiscalidad diferenciada es determinante para instalarse en Soria?

Para muchas empresas sí, aunque también es cierto que hay empresas que valoran también otras cuestiones como una salida al mar, gastos de logística... Pero, lógicamente, las empresas se interesan mucho por la fiscalidad diferenciada y hay algunas que están pendientes de esa decisión para venirse a Soria. Por eso para nosotros es un fiasco no poder contar ya -y además con carácter retroactivo desde enero- con esa posibilidad. 

El Gobierno dijo que sí pero seguimos como estábamos y nos parece alarmante y no lo entendemos. 

Por lo que le entiendo, ¿hay inversiones que se están viendo frenadas porque no llega esa fiscalidad?

Sí, porque están pendientes de que se aprueben e implementen esas ayudas de funcionamiento en los costes laborales y saber el porcentaje exacto de apoyo. Porque no es lo mismo contar con un 20% que con un 5% y las empresas tienen que valorar todo antes de tomar la decisión. Por eso no entendemos por qué el PSOE y el Gobierno de España se está portando así de mal con estas tres provincias.  

¿Está previsto que próximamente puedan llegar nuevas empresas? 

La maduración de una empresa lleva mucho tiempo y hay empresas que lo tienen claro, otras que están analizando ahora la situación dada la coyuntura actual, otras que están en periodo de consulta con sus matrices, otras que están valorando diferentes alternativas... Hay de todo pero es innegable que hay una especie de frenazo por lo que está pasando a nivel mundial. El dinero es muy miedoso y las inversiones exigen seguridad y estabilidad, y ahora no la hay. 

En anteriores entrevistas siempre salía a colación la falta de suelo industrial en la capital y su alfoz y cómo eso limitaba el crecimiento. El PEMA y Valcorba parece que por fin están desbloqueados, ¿qué previsión ve para estos dos polígonos?

Creo que son dos polígonos importantes y para Soria son fundamentales porque hasta ahora en la capital no teníamos suelo industrial y dependíamos de Ólvega, Almazán y el pequeño polígono de Medinaceli. El hecho de que Valcorba estuviera sin recepcionar y el PEMAbloqueado nos ha dado muchos problemas porque no había oferta para enseñar a posibles inversores. Ahora tenemos mucha más oferta y creo que son dos polígonos importantes y lo que hay que hacer es adecuar los precios del suelo para hacerlos más atractivos.  

En estos momentos están sobre la mesa las ayudas al funcionamiento de empresas en zonas despobladas (fiscalidad diferenciada), los PERTES (proyectos estratégicos de los sectores), el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, las manifestaciones de interés, los fondos Next Generation EU… ¿Qué expectativa real tiene el empresariado soriano ante la llegada de fondos europeos y las diferentes líneas de apoyo?

Hace ya tiempo que estamos mosqueados con el tema de los fondos porque es una gran oportunidad para España que venía además a modificar y modernizar las estructuras empresariales y los modelos de negocio (hacia un modelo más digital, sostenible, con menos emisiones...) y había dinero y proyectos, pero vemos que todo está parado. Prácticamente no se mueve ninguno de los proyectos y, además, ahora mismo, con la situación en la que estamos los empresarios, vemos complejo que podamos asumir unas inversiones del 70% en los proyectos de este tipo y por eso estamos pidiendo que sean al 50-50. 

Luego hay otros proyectos que pensamos que no pueden convertirse en un 'plan E' como el que hubo en su momento con Zapatero. Creemos que no tiene que servir para hacer 'chapuzas', sino que tiene que servir para inversiones que cambien el modelo de empresa, de organización, de sistema, o el propio sector hacia temas más digitales, más sostenibles, más responsables socialmente, más hacia la Agenda 2030...

¿Teme que se pueda llegar a perder ese dinero proveniente de Europa?

Realmente estamos preocupados porque no vemos que ese dinero llegue a las empresas y nos preocupa enormemente perder esta gran oportunidad ahora mismo. 

Esperamos que por el bien de todos se cambien los criterios de actuación en cuanto a la llegada de fondos porque, además, los plazos apremian. Para el 31 de diciembre de 2023 tienen que estar presentados todos los proyectos y hay que tener en cuenta que la maduración de un proyecto es larga. Queda año y medio y hay iniciativas que no va a dar tiempo. Y, luego, la ejecución son otros tres años, es decir, deben estar terminados a 31 de diciembre de 2026. 

Tenemos la presión de la fecha y del modus operandi del Gobierno que -creo- no es el adecuado. El punto de vista de la CEOE [Confederación Española de Organizaciones Empresariales ] es que vemos que los fondos no van a llegar nunca y es una gran oportunidad perdida. Se debe agilizar y dar un cambio absoluto a la actuación que ahora mismo está llevando a cabo el Gobierno.

En el plano autonómico, ¿qué espera del nuevo Gobierno de Castilla y León?

Estamos preocupados porque han pasado más de cien días de las elecciones y no tenemos Gobierno. He pedido rapidez en cerrar los acuerdos porque Castilla y León necesita un Gobierno estable y fuerte lo antes posible, porque hay muchísimas situaciones paradas desde hace mucho tiempo y, con la que está cayendo, esto se tiene que empezar a mover y se tienen que empezar a tomar decisiones importantes. 

Del Gobierno espero que dé estabilidad, seguridad y calidad de la norma a la Comunidad, porque es fundamental para el mundo económico. Nosotros vamos a estar ahí para sacar adelante y apoyar a esta Comunidad en todo lo que podamos. 

Hasta el momento, ¿ha cumplido el Plan Soria de la Junta las expectativas que usted tenía? ¿Y teme que esta situación pueda poner en cuestión su continuidad como estaba comprometido?

Esperemos que no, aunque desde luego del Plan Soria no hemos visto  todavía nada que merezca la pena. 

El último anuncio fue el Plan Soria Conectada y Saludable 2021-2027 y esperamos que a partir de ahí haya responsabilidad por parte de la Junta y cumpla lo prometido. Y esperamos que este nuevo Gobierno de coalición no merme esas posibilidades de actuación en Soria y se cumpla lo teníamos pactado. 

¿Le preocupa el futuro de Ondara?

Siempre que hay una situación de crisis en una empresa preocupa, sea Ondara o cualquier empresa. Esperamos que se resuelva y consiga salir adelante. 

¿Esta va a ser su última legislatura?

Nunca se puede decir de este agua no beberé pero la intención es acabar la legislatura y marcharme, y ya se lo he dicho a la gente que está en el Comité Ejecutivo, que es gente joven porque se ha ido renovando mucho en los últimos años.

 Hay gente joven con otros modelos de trabajar, otras ideas, otros pensamientos y criterios, y creo que tienen que dar el paso y ser valientes y asumir el peso de esta federación, que está ahora muy bien posicionada. 

También en la Cámara de Comercio e Industria de Soria va a haber elecciones próximamente. En las anteriores se presentó una candidatura desde FOES para liderar la entidad, ¿tiene previsto hacerlo de nuevo?

No, rotundamente no.  

¿Cuál es la relación con la Cámara?

No es ni buena ni mala, hay muy poca relación. 

Las empresas suman ya dos años dramáticos. ¿Cuándo cree que van a parar las malas noticias? Hay quien estima que hasta finales de 2024 o principios de 2025 no se aventura el final del túnel…

Ahora mismo tenemos una situación de crisis importante y el propio presidente del Gobierno ha dicho que nos vamos a tener que apretar el cinturón y que vamos a pasar unos tiempos muy difíciles. Van a ser años muy complicados y yo no me atrevo a decir cuándo conseguiremos salir de esta situación pero, cuanto más dure la guerra de Ucrania (que ha sido otro mazazo a la economía), más complicado va a ser y más tardaremos en salir de esta situación.